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 miércoles, 07 de julio de 2004

Genómica funcional made in Argentina
El primer centro del país funciona en La Plata. Su director vaticina que faltan años para que la genética se utilice en la prevención de enfermedades

María Laura Favarel / La Capital

En la ciudad de La Plata comenzó a funcionar recientemente el primer Centro Regional de Estudios Genómicos (Creg) del país. La iniciativa es un emprendimiento conjunto del Instituto Max Plank de Biofísica y Química de Goettingen (Alemania) y 15 universidades argentinas (incluida la UNR), Brasil, Uruguay, Chile y Paraguay. La dirección del Creg estará a cargo de Rolando Rivera Pomar, científico argentino especializado en genómica funcional que regresó al país luego de trabajar 13 años en Alemania. Rivera Pomar visitó Rosario en oportunidad del Congreso Bioquímico realizado recientemente. En el marco del encuentro, el científico dialogó con La Capital acerca de la aplicación de la genética en la cura de enfermedades.

“La genómica funcional se presenta como la disciplina del futuro. La interpretación del desempeño de los genes de cada organismo podría prever y evitar un mal funcionamiento que deriva en enfermedades terminales. La expectativa es muy grande, sin embargo, al presente contamos con un gran caudal de información todavía sin descifrar. Información no es conocimiento”, remarcó el científico.

Para referirse al tema, Rivera Pomar utilizó la frase de Umberto Eco, “vivimos en una sociedad con exceso de información, donde puede haber muchos ignorantes bien informados”, dijo para explicar que si bien el descubrimiento del genoma humano significa un avance importante porque se obtuvo una gran cantidad de información, “todavía estamos muy lejos de poder interpretarla”.

“Es como si tuviéramos la guía telefónica de Rosario y nos preguntáramos quién es el intendente y cuál es el índice de desocupación. Poseo mucha información, pero eso no significa que sepa algo sobre Rosario. Tal vez, si llamo a toda la guía telefónica y pregunto si tiene empleo, cuánto gana, a quién votó, recién allí puedo tener una idea de cuál es el porcentaje de desocupación de los que poseen teléfono”, graficó. Lo mismo ocurre con el genoma. La genómica funcional trata de utilizar esta información para interpretar fenómenos más complicados y comprender el funcionamiento de los genes.

Se sabe que un genoma tiene un número de genes, pero no todos funcionan del mismo modo. Por ejemplo, las células que dieron origen al hígado o al ojo tienen los mismos genes, pero se activaron y comenzaron a funcionar distinto. Así unas dieron origen al hígado y otras a un ojo. La genómica estudia qué conjunto de genes trabajan coordinadamente para que un grupo de células forme un ojo o un hígado. Así sucede que hay genomas muy parecidos, pero tienen capacidades distintas y esto provoca la diferencia. Los expertos estudian qué es lo que hace que las capacidades sean diferentes en cada individuo.

Rivera Pomar apuntó que esto genera un problema ético serio “porque puede llevanos a pensar que todo tiene un origen genético y depende del funcionamiento de los genes. Entonces se podría pensar que un delincuente actúa así por su carga genética y en realidad en el comportamiento también influyen el ambiente y otros factores culturales”.

Por todo ello el experto aclaró que la genética funcional “está a 50 o 100 años de dar respuestas a muchos interrogantes para que podamos hablar de prevención”, aclaró.

Actualmente en el mundo se investigan formas de prevenir enfermedades como el cáncer y mejorar los tratamientos. Al respecto, el especialista explicó que una célula cancerígena tiene la misma información que una célula sana. “Esto demuestra que existe un conjunto de genes que actúa de una manera previsible y otros no”.

“Si se pudiera definir cuáles son los genes que se activan en una célula cancerosa respecto a una normal, se podría pensar de qué manera modificar la actividad de esos genes para que la célula normal no se transforme en patológica. También se podría descubrir una droga que detenga el tumor. Recién cuando pueda entenderse este proceso se podrá hablar de prevención de enfermedades terminales”, aseguró Rivera Pomar.

El especialista argentino apuntó que sobre el tema “existen muchos mitos y un exceso de expectativa. Todos los días se anuncian nuevas curas para el cáncer, pero la enfermedad nunca se curó

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"Contamos con mucha información aún sin descifrar", afirmó Rivera Pomar.

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