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 martes, 06 de abril de 2004

Sigue perdido en Brasil un joven argentino

Pablo Nieto, uno de los jóvenes que viajó al norte de Brasil y perdió contacto con sus familiares en enero último, continuaba ayer desaparecido y con seguridad enfermo, mientras que su amigo Lucas Ulanovsky, que fue encontrado la semana pasada, permanece internado en un hospital de Macapá, capital del estado de Amapá.

"El no sabe que lo estamos buscando, cuando supimos que ellos estaban en Calcoene, en realidad estaba sólo Lucas porque Pablo se había ido, aparentemente para Bahía", comentó José Molinos, el argentino que cuando supo de la desaparición de los jóvenes se embarcó a fondo en la búsqueda y encontró a Lucas. En ese momento, se presumía que Pablo estaba en la localidad de Lourenco.

"Lucas contó que Pablo dijo que se iba para Bahía; él requiere de una medicación que no había en Calcoene. Lo cierto es que necesita ponerse varias inyecciones para curarse porque si no la infección que tiene -leismaniosis- le va comiendo la piel", dijo Molinos.

Pablo estaría viajando hacia algún centro urbano donde poder curarse o estaría en un hospital, debido al agravamiento de su enfermedad.

"No sabemos nada", precisó Molinos, quien agregó que "hay que buscar en hospitales. Tampoco sabemos si él es consciente de la enfermedad que padece y sus consecuencias, que pueden ser mortales si no se trata". Lucía, la madre de Pablo, que vive en la localidad cordobesa de San Marcos Sierra, está desesperada por saber dónde está su hijo y teme por su estado de salud.

En tanto, Lucas continúa internado en un hospital de Macapá, junto a sus padres y se recupera para retornar a Buenos Aires.

Lucas y Pablo se habían ido a Brasil de mochileros en septiembre de 2003 y se habían comunicado por última vez con sus familiares a mediados de enero último. Lucas fue encontrado tras la búsqueda de Molinos, que recorrió parte de la región de Amapá donde se pensaba que podían estar, y a raíz de no tener ningún rastro logró que la información y las fotos de los chicos salieran por la televisión brasilera por lo que una chica le indicó dónde podían estar. (Télam)

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