Una intervención por la acefalía en Maciel cuenta con voces a favor

Leonardo Malizani (PJ) y Ramón Lamboglia (UCR) esperan una medida del gobernador "cuanto antes"

Maciel.- La situación de acefalía en la comuna de esta localidad no tendría otra solución que la intervención y posterior llamado a elecciones de aquí a dos meses, según las posturas manifestadas por miembros electos para la frustrada comisión de fomento, que por diferencias entre sus integrantes peronistas no pudo constituir sus autoridades el pasado 10 de diciembre. Tanto el justicialista Leonardo Malizani como el radical Ramón Lamboglia dijeron a La Capital que no ven ninguna salida viable y esperan que "cuanto antes" el gobernador Jorge Obeid designe un interventor y que la cuestión se resuelva en las urnas.

El dilema planteado se originó días después de los comicios del pasado 7 de septiembre, en los que se impuso el sublema justicialista encabezado por Roberto Ramella. Según la ley, de la votación resulta una comisión de cinco miembros titulares que deben elegir al presidente, pero la costumbre es que ese cargo recaiga en quien encabezó la lista ganadora. Esta tradición se cumple en todas las elecciones de cada pueblo, pero en este caso en Maciel se rompió. Resulta insólito que en esta ocasión se debe a una fractura entre los cuatro vocales que ingresaron por la lista ganadora: un sector integrado por Ramella y Alberto Bertoni, y otro por Malizani y Mabel Lavallén. La votación arrojó un empate que el quinto miembro, el ex jefe comunal Ramón Lamboglia -ingresado por la minoría- no destrabó ya que se votó a sí mismo.

La acefalía implicó que los trabajadores tomaran la comuna y, merced a su voluntad y la de vecinos, se pudieran prestar los servicios mínimos en forma precaria. Pero al dejar de cobrar y quedarse sin recursos, la comuna fue finalmente cerrada y los empleados incrementaron sus protestas, tal como informó ayer este diario.

"Acá no hay arreglo posible y preferimos que intervengan. No podemos prestarnos a gobernar con gente que nos usó para ganar las elecciones y que ahora convoca a otras personas que no tienen nada que ver con nosotros", dijo ayer Malizani, en alusión a Ramella -quien no pudo ser contactado por este diario durante la tarde de ayer- de quien agregó: "Ya hizo esto la vez anterior (en otra ocasión en la que éste fue presidente comunal) pero ahora no se va a salir con la suya".

Malizani sostuvo que su sector se reunió tres veces con el subsecretario de Comunas, Roberto Meli, quien les pidió que arreglaran la cuestión sin la intervención del gobierno provincial. "Podríamos aceptar incluso que Ramella fuera el presidente -sostuvo- siempre y cuando se baje Bertoni, porque de esa manera tendríamos más fuerza dentro de la comisión. Pero ellos no ceden".

"Propusimos que se hiciera un plebiscito, que se decidiera por sorteo, pero él no aceptó nada. Bueno, que intervengan, este pueblo no puede seguir así", disparó Malizani, un productor agropecuario de 65 años quien debutó en política en esta campaña, según dijo, "con la intención de colaborar con el pueblo y trabajar por un peronismo sano como el que propone el presidente Néstor Kirchner y el gobernador Jorge Obeid".


Segunda vuelta
Por su parte, Lamboglia se manifestó directamente a favor de la intervención. El ex jefe comunal explicó que decidió votarse a sí mismo para no terciar en una interna de la que se siente ajeno. "En diciembre, tras reunirme con los integrantes del lema PS, decidimos que no íbamos a pronunciarnos por ninguno. Nosotros perdimos las elecciones por 50 votos y yo no iba a ser justo con mis electores", dijo el presidente comunal saliente.

Lamboglia relató que su sector recolectó 1.200 firmas de vecinos que solicitan la intervención. "Una de las principales causas para una medida así -consideró- es la acefalía en el gobierno y, como están dadas las cosas acá, es imposible que se pueda resolver de otra manera".

Asimismo, el radical sostuvo que esta situación ya estaba prevista y que era público en el pueblo que los ganadores no se pondrían de acuerdo para formar la comisión. "Aunque no hay un clima agitado y la gente está tranquila, creo que en el pueblo casi todos están esperando la intervención, así no se puede vivir. No creo que nadie se oponga a que haya que votar otra vez".

La comuna continúa acéfala y muchos no ven otra salida que la intervención.