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 miércoles, 07 de enero de 2004

En los últimos doce meses la entrada de muebles de Brasil se quintuplicó
Industriales cañadenses temen que la importación perjudique la reactivación
Fabricantes de armarios y amoblamientos de cocina, en alerta. Critican subsidios dados al socio del Mercosur

Walter Gasparetti / La Capital

Cañada de Gómez.- Los industriales dedicados a la fabricación de muebles de madera de esta ciudad temen que la leve mejora que presenta el sector, como consecuencia de la reactivación del mercado interno, sea perjudicada por la importación de similares productos que provienen desde Brasil. La preocupación se sustenta en una estadística brindada por la Federación de Argentina de la Industria de la Madera y Afines (Faima) de la Capital Federal. Esta entidad asegura que la importación de muebles desde el país vecino se quintuplicó en los últimos doce meses.

El estudio realizado indicó -además- que el ingreso de armarios y amoblamientos de cocina puso en estado de alerta a los productores locales, quienes cargaron contra los subsidios federales y estatales otorgados por los gobiernos regional y nacional del país socio del Mercosur. Esa es la causa por el cual se solicitó la aplicación de cupos de ingreso.

Según Faima, entre enero y noviembre de 2003 más del 90 % de los muebles de madera que se importaron provino precisamente de Brasil. En el caso de los placares representó el ciento por ciento de la mercadería ingresada a través de la Aduana.

"Esta información es sugestiva y nos pone en alerta, a precio dólar el producto hecho de mueble de madera tuvo una disminución del 40 %. Eso demuestra que hay una inyección de fondos del Estado para fomentar la exportación", explicó a La Capital, Eduardo Turri, representante de la Cámara de la Industria Maderera y Afines.

La industria del mueble representa junto al sector agropecuario la principal fuente de trabajo en la economía de esta ciudad. Desde la devaluación, se inició un período de reactivación. Pequeñas y medianas fábricas que quedaron paralizadas en la época del 1 a 1 retomaron la labor con una incipiente contratación de personal.

Turri calculó que de los mil puestos de trabajo que se perdieron en los últimos cuatro años, se recuperó apenas un 20 por ciento. "Existe una alta capacidad ociosa que supera el 70 por ciento de la infraestructura montada. Entendemos que este año continuará la reactivación, aunque no estamos seguros de llegar a la época dorada", comentó el empresario.

En efecto, si bien las fábricas medianas tuvieron una rápida reacción (incluso conquistando otros mercados) el problema más agudo lo enfrentan los pequeños talleres que, en muchos casos, confeccionan piezas para otras empresas. Por lo general estas fábricas no sobrepasan los diez operarios contratados. "Todo es positivo si comparamos la actual actividad con la que teníamos hace dos años, pero debemos seguir trabajando para mejorar, debido a que la recuperación aún es lenta. No todas las empresas pudieron dar una respuesta inmediata porque no contaban con capital de trabajo", confió el industrial.

Turri confió que la evolución seguirá siendo favorable en los próximos meses, aunque puso reparos si se observa nuevamente una presión tributaria e impositiva por parte del actual gobierno. "Esa es una de las razones por la que se pidió un cupo de ingreso de los muebles que provienen de Brasil o la aplicación de alguna cláusula de salvaguarda", acotó.


Proyectan un paseo de compras
El caso más representativo del empuje que generó el nuevo plan económico a la industria del mueble cañadense es la fábrica de muebles de Eldo Omar Mosconi, asentada a la vera de la ruta 9, en uno de los ingresos a esta ciudad. El establecimiento proyecta, en las instalaciones, un paseo de compras inédito en la región.

"Se trata de una idea que queremos vaya tomando forma en los próximos meses para aprovechar una estructura que tendrá características de local comercial y que no sólo ofrecerá muebles de madera", dijo Mosconi. En un aviso comercial la idea fue lanzada por la empresa como un paseo de compras para la región. El lugar tiene espacio suficiente para estacionamiento. El establecimiento genera unos cien puestos de trabajo en forma directa e indirecta.

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La industria del mueble es una de las principales fuentes de trabajo en Cañada.

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