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 jueves, 18 de septiembre de 2003

El grupo Petersen aspira a consolidar el perfil regional de la entidad
El BCRA al fin autorizó la venta del Nuevo Banco Santa Fe
Tras un largo trámite, el 93,4% del paquete accionario pasa a manos del Banco de San Juan por $ 133 millones

El Nuevo Banco de Santa Fe (NBSF) ya tiene nuevos dueños. El Banco Central de la República Argentina (BCRA) autorizó ayer la venta de la entidad santafesina al Banco de San Juan SA, que se quedará con el 93,4 por ciento del paquete accionario, por 133 millones de pesos, de los cuales ya desembolsó 27 millones -un 20%- cuando ejerció la opción de compra.

El proceso culminó luego de cuatro meses en los cuales la autoridad monetaria realizó una evaluación técnica minuciosa de la oferta efectuada por el grupo que preside Enrique Eskenazi, para lo cual acordó dos prórrogas con el ABN Amro Bank, la entidad que controlaba el fideicomiso administrador del Santa Fe.

De este modo, el Banco de San Juan se quedará con la totalidad de las acciones clase A (que representa el 93,4% del valor de la entidad financiera), ya que el resto son acciones clase B y corresponden al programa de propiedad participada (PPP) de los empleados, aunque por el momento la provincia de Santa Fe ejerce la titularidad de esos papeles.

Un comunicado oficial emitido anoche por el BCRA expresa que "el directorio del Banco Central aprobó la transferencia del 93,4 por ciento del paquete accionario del Nuevo Banco de Santa Fe al Banco de San Juan, ganador de la licitación mencionada y cuyo contrato de compraventa de acciones fue suscripto en el mes de mayo de este año".

El Central informó además que "el tiempo transcurrido entre la licitación y la autorización de este Banco Central permitió que el adquiriente mejorara sustancialmente su oferta, la que en los términos actuales resulta en una entidad consolidada más solvente y más líquida aún, siendo estos aspectos fundamentales a los objetivos de este ente rector".

La traba principal para cerrar la operación de venta estaba centrada en una capitalización que exigía la autoridad monetaria al Banco de San Juan como condición para afrontar la compra del NBSF.

Según se consignó oportunamente, el Central planteó al grupo oferente un mix de capitalización del capital accionario por 50 millones de pesos en efectivo y la emisión de obligaciones negociables por otros 60 millones, de los cuales 30 millones deben estar garantizadas. Tal como se había consignado en el último pedido de prórroga, el grupo que comanda el Banco de San Juan aceptó los requerimiento del BCRA.

Eskenazi expresó ayer su "enorme satisfacción" por la aprobación de la compra del paquete accionario de la entidad santafesina por parte del Central y anunció que aspira a "consolidarla como un referente de la región".

"El despegue de la Argentina está íntimamente ligado al crecimiento de la actividad financiera, y la banca regional es una herramienta indispensable para el desarrollo financiero y económico de las provincias", dijo el presidente del Banco San Juan. La información oficial proveniente del Central indica además que "la fusión final, prevista para dentro de los próximos 12 meses, concluirá formalmente el proceso de consolidación de ambas entidades que en la fecha se autoriza".


El nuevo perfil
A la hora de expresar los objetivos de negocios que el grupo se plantea con la entidad santafesina, el directivo afirmó que aspiran "consolidar un banco para los productores, las pymes, los empleados públicos y toda la población, mediante el desarrollo del crédito y en un trabajo mancomunado con el gobierno de la provincia".

Señaló además que "la provincia de Santa Fe posee un enorme potencial productivo que necesita de una herramienta financiera para llevar adelante las políticas gubernamentales de desarrollo en el sector agropecuario y en los círculos industriales del norte y que rodea a la ciudad de Rosario, por eso es imprescindible la creación de un banco provincial fuerte".

El nuevo dueño del NBSF también controla el 51 por ciento del Banco Santa Cruz. Ambas entidades -presididas por Eskenazi- coinciden en un denominador común: están situadas en áreas clave para la expansión económica de la Argentina.

El Banco de San Juan está controlado por el grupo Petersen, Thiele & Cruz (PTC), un holding económico de capital nacional que surgió en 1918 como empresa de ingeniería y construcciones y a lo largo de estos años desarrolló y dirigió obras públicas y privadas en Argentina y Chile.

En los últimos años amplió la base de sus operaciones comerciales en otros sectores de la economía, entre ellos los servicios bancarios.

A través de Petersen Inversiones, lideró un grupo de inversores para la adquisición del Banco de San Juan y del Banco de Santa Cruz.

"Petersen, Thiele & Cruz está preparado para volcar en el Nuevo Banco de Santa Fe toda la experiencia atesorada en la gestión de los bancos de Santa Cruz y San Juan, claros ejemplos de eficiencia y liderazgo en las economías regionales", expresó ayer Eskenazi.

El banco cuyano presentó la mejor oferta económica para quedase con el NBSF por un total de 133 millones de pesos y dejó atrás a los otros tres postulantes: La Caja (78 millones), Banex (57 millones) y Banco Comafi/Macro (55,6 millones).

A partir de la autorización del Banco Central el nuevo dueño deberá convocar a una asamblea para modificar o mantener la conformación del directorio del Nuevo Banco de Santa Fe.

Desde el gobierno provincial se mantuvieron muy cautos sobre el tema, una actitud que se repitió a lo largo del proceso de evaluación del BCRA- y se manejaron atendiendo estrictamente al protocolo oficial.

Ayer, el ministro de Hacienda santafesino, Miguel Asensio, explicó que esperaban la comunicación oficial del Central para explayarse sobre cuáles serán los pasos que seguirá la provincia de aquí en adelante, teniendo en cuenta que deben resolver una fórmula para avalar el cambio en la propiedad del agente financiero de la provincia.

Sin embargo, el ministro aseguró que desde la provincia "no se dejó de trabajar en los aspectos que tienen que ver con la participación posterior que tendrá que asumir una vez concretada la transferencia".

En rigor, el gobierno provincial deberá decidir si utiliza la figura del decreto ad referéndum o recurre directamente al tratamiento parlamentario para autorizar el cambio del agente financiero del Estado santafesino.

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El titular del grupo Petersen, Enrique Eskenazi.

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