| lunes, 01 de septiembre de 2003 | Remataron los bienes del bar cañadense más emblemático El cierre del Victoria sorprendió a todos. Por una deuda de 5.000 pesos se vendió el mobiliario en 300 Cañada de Gómez. - El Victoria, el bar más emblemático de la ciudad, cerró ante la mirada atónita de los cañadenses. Un oficial de justicia y varios efectivos policiales cumplieron con una orden de remate y se llevaron mesas, sillas, lámparas y hasta una máquina de hacer café. "Remataron en Rosario mientras el dueño estaba tratando de pagar la cuota de una deuda en la Afip en Cañada. Lo más curioso es que pagaron 300 pesos por todo", dijo una fuente que prefirió reservar su identidad.
El remate se llevó a cabo en la delegación del Colegio de Martilleros de Rosario. Los compradores, según pudo saber este diario, son propietarios de bares similares que previamente contaban con esa información.
Los habitués se encontraron el viernes con las puertas cerradas y las vidrieras pintadas de blanco. El más desconcertado pareció ser el lustrabotas que allí trabajaba; se quedó sentado en su banquito de madera como esperando una explicación a tanto silencio en la esquina más bulliciosa de la ciudad. El cierre del Victoria también sorprendió vecinos de otros barrios, al verlo desierto en plena mañana.
Voceros de la Afip informaron a este diario que el propietario mantenía una deuda de impuestos del orden de los 5.000 pesos. Otra fuente consultada explicó que la familia Corona -administradora del local- estaba dispuesta a pagar una cuota cuyo monto fue modificado ese mismo día en la delegación local de la Afip. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El cierre del Victoria sorprendió a todos. | | |