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 martes, 24 de junio de 2003

El gobierno ibérico impulsa que el megaevento cultural no se haga en capitales
Rosario es favorita como sede del III Congreso de la Lengua Española
Será en septiembre de 2004. La ciudad tiene la mayor chance y un solo competidor: como siempre, Buenos Aires

Silvina Dezorzi / La Capital

Rosario corre como favorita para ser sede del III Congreso Internacional de la Lengua Española el año próximo, nada menos que con la apuesta del propio gobierno ibérico. En las dos ediciones anteriores se eligió ex profeso a ciudades no capitales: Zacatecas (México 1997) y Valladolid (España 2001), donde se dieron cita los reyes de España, numerosos jefes de Estado y lo mejor de la cultura de Iberoamérica. Ahora se aguarda la decisión del gobierno nacional, que en unos días debe presentar su propuesta final ante el Ministerio de Asuntos Exteriores español. El cónsul de ese país en Rosario, Juan Ignacio Alvarez Gortari, fue categórico: "En España todo el mundo quiere que se haga aquí". Sin embargo, existe temor de que el diablo meta la cola y, fiel al tradicional centralismo argentino, finalmente el congreso se quede en Buenos Aires. "La pelota está ahora en la cancha porteña", confesó el cónsul, con un giro más canyengue que castizo.

Puesto en antecedentes por el propio Alvarez Gortari, el 17 de junio pasado, de que Rosario corre algún riesgo de terminar siendo desplazada, el intendente Hermes Binner se comprometió a hablar del tema personalmente con el presidente Néstor Kirchner. Como la charla aún no se concretó, decidió enviar el pedido formal por escrito, que ayer llegó a la Presidencia de la Nación, según confirmó a La Capital el secretario de Cultura municipal, Marcelo Romeu.

Tanto Binner como Romeu afirmaron que hay "grandes chances" de que el pedido encuentre eco, porque desde la propia España hay interés en que el protagonismo no recaiga en ciudades capitales. "Nuestro interés es mayúsculo", sostuvo el intendente, mientras el secretario de Cultura aseguró que de ese modo Rosario se afirmaría como "una ciudad referente de la cultura iberoamericana".

La idea de que la tercera edición del máximo encuentro de la lengua hispánica se haga en Argentina ya se había barajado en el congreso anterior de Valladolid. Después el ex presidente Fernando de la Rúa dio su visto bueno y su sucesor, Eduardo Duhalde, confirmó la aceptación el 7 de abril pasado, en una reunión que mantuvo en Madrid con el director de la Real Academia Española, Víctor García de la Concha.

Allí Duhalde se comprometió a que su sucesor mandaría, en un plazo de tres meses, el proyecto oficial para el congreso. Lo que incluirá, en primer término, qué ciudad hará de sede. "El gobierno español tiene muchísimo interés en que se haga el congreso y de allí mismo surgió la propuesta de que se realice en Rosario", afirmó el cónsul. Por ahora lo único seguro es que el encuentro tendrá lugar en Argentina a fines de 2004, probablemente en septiembre.

"Como hasta ahora nunca se ha hecho en grandes capitales, entonces el gobierno español propuso a Rosario como sede: todo el mundo en España quiere que se haga aquí", agregó. La posibilidad de que el "superevento", como lo definió Alvarez Gortari, termine radicado en otro lado sólo depende del gobierno nacional que, como se sabe, al igual que Dios está en todas partes pero atiende en Buenos Aires.

"La pelota está en la cancha porteña exactamente", advirtió el cónsul, que dijo no estar "tan convencido de que las autoridades se atrevan a renunciar a que el lugar sea Buenos Aires" a la hora de dar el okey final sobre la sede del congreso.

La "ilusión" del funcionario ibérico para que finalmente Rosario sea anfitriona está apoyada, además, en razones bien concretas. "De las ciudades con huella española, esta es la que tiene mejores instalaciones para albergar a tanta gente y tanto evento", afirmó, entre las que mencionó al Centro Cultural Parque de España, "el mejor edificio que tiene la colectividad en Argentina".


Un mes más de espera
Para saber en qué etapa del trámite se encuentra la organización del congreso, desde la embajada de España en Argentina se aconsejó consultar a la Consejería Cultural que depende de esa sede diplomática. La respuesta sugirió un estado de stand by, ya que voceros de ese organismo indicaron que la decisión oficial recién se conocerá a mediados del mes próximo.

Sin embargo, fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores en España que prefirieron reserva de sus nombres admitieron que en esa cartera "hay mucho interés en que Rosario sea sede del congreso" y que también existe una expectativa similar en el Instituto Cervantes, el otro gran organizador del evento junto a la Real Academia Española.

No por casualidad, el actual director general de Relaciones Científicas y Culturales de Asuntos Exteriores español es Jesús Silva, precisamente un ex cónsul en Rosario que tuvo activa participación en la vida cultural de la ciudad.

En una palabra: en ambos lados del océano hay interés por que el III Congreso Internacional de la Lengua Española se lleve adelante en Rosario, aunque resta conocer qué posición asumirán las autoridades nacionales.

La suspicacia tiene asidero: en una edición de abril pasado de la revista "La Maga", editada en Buenos Aires, se dice textualmente que el entonces presidente Duhalde entregó al titular de la Real Academia una "copia del decreto mediante el cual se organizará en Buenos Aires el Tercer Congreso Internacional de la Lengua", por considerarse a esa ciudad como "representativa de la lengua y la cultura iberoamericana".

Sin chauvinismos, una pregunta por derecho y de cajón: ¿Rosario no?

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