En una carta al gobernador Carlos Reutemann, la Comisión Permanente de Productores Agropecuarios, Municipios y Comunas Afectados por los Desmanejos Hídricos en la Provincia de Santa Fe solicitó la urgente modificación de la ley de emergencias y la indemnización por lucro cesante. El grupo viene pidiendo un cambio de timón de la política hidráulica y el jueves pasado clamó por la renuncia de técnicos y funcionarios del área.
"Muchas quiebras empezaron con la ley de emergencia", aseguraron los productores y calificaron de injusto al sistema que en la actualidad define a ese paliativo de acuerdo al porcentaje de campo anegado. La referida norma, que pospone los compromisos tributarios mientras dure la afectación, "debe ser modificada en forma urgente".
La comisión propone eximir de la obligación tributaria al productor en proporción al porcentaje del predio que quede excluido del sistema productivo. Además, piden que se excluya a las superficies de campo afectadas por falta de piso para realizar labores agrícolas debido a las inundaciones.
También reclaman que el Estado indemnice por lucro cesante, sin necesidad de juicio previo, a la explotación agropecuaria hasta tanto pueda funcionar, si la emergencia o el desastre es producto de la negligencia, impericia u omisión del gobierno nacional, provincial o comunal.
Según Ulises Forte, de la Federación Agraria Argentina, "el pedido de reforma de la ley de emergencia es un viejo reclamo provincial y nacional, ya que se trata de una prórroga de impuestos cuando debiera ser una condonación, porque no se puede pagar por algo que no produce" y aseguró que ahora "la ley es un salvavidas de plomo".
"Urge que nos reciba, que podamos hablar en forma directa, con usted, sin los interlocutores que durante diez años han llevado a la provincia a un caos hídrico permanente y que le están haciendo cometer error tras error", sostienen en el documento dirigido a Reutemann, aunque lo elogian por haber tomado en sus manos el problema de las inundaciones.
La carta también señala que "es lamentable e irritante que después de tamaña catástrofe el ingeniero Ricardo Fratti se dedique a intimar y amenazar con cartas documento a los integrantes de la Asociación de Vecinos de Cañada de Gómez, que padecen tres muertes y la pérdida materiales".
Testimonios
"Queremos trabajar ahora porque después, cuando el agua se va, todos nos olvidamos", dijeron los afectados por la cuenca de la laguna Setúbal, alimentada por el arroyo Leyes, y aunque no están inundados insisten en participar de la comisión. "La gente de Hidráulica cambió el proyecto entre gallos y medianoche", denunciaron.
Eraldo Carrara, de la Comisión Camineros de los Bajos Submeridionales, dijo que Santa Fe nunca hizo nada para dar curso al agua que llega desde otras provincias. "Del Chaco nos entra agua a través del paralelo 28, que no sale al río Paraná e inunda a los departamentos Vera y 9 de Julio", explicó.
Según Silvio Bandeo, de la Sociedad Rural de Villa Minetti, en esa región faltan drenajes naturales, lo que se trató de resolver mediante canales que no responden a la necesidad de los productores.
Los representantes de los inundados de Cañada de Gómez dijeron que tienen la grabación de una charla cuando los vecinos advertían sobre el riesgo de la inundación al senador Norberto Betique, al intendente Amílcar Abate y al ingeniero Pastor (empleado de la firma Edeca). "Nos trataron de subversivos y el intendente dijo que faltaban obras pero que se había terminado la plata. Ocho días después murieron tres personas y diez mil familias vieron arrasadas sus viviendas", enfatizaron.
La Ciudad
