Desteñido, y mostrando escasísimas dosis de buen fútbol, River Plate resignó ayer dos puntos muy importantes al igualar 3 a 3 como local frente al colista Gimnasia y Esgrima La Plata y ahora comparte el liderazgo del Clausura con San Lorenzo.
Gimnasia se puso en ventaja por un penal de Ariel Pereyra, River lo dio vuelta con sendos cabezazos de Eduardo Coudet y Javier Saviola, el equipo visitante igualó a través de Jorge San Esteban, cuando faltaban 7' para el desenlace un frentazo de Hernán Díaz pareció decisivo, pero ya en tiempo de descuento volvió a nivelar San Esteban.
De esta manera, River fue incapaz de superar a uno de los últimos en la tabla de posiciones y volvió a mostrar que su principal argumento es la contundencia ofensiva, atributo al que deberá agregarle otros méritos si quiere quedarse con el campeonato, ya que su horizonte está menos claro que en otros momentos de esta competencia.
Gimnasia arrancó mejor, presionando y quitándole la pelota a un River dormido. Habían pasado apenas 5' cuando el equipo visitante se encontró con un regalo del árbitro Horacio Elizondo, quien cobró penal ante una inexistente infracción de Pedro Sarabia a Facundo Sava, que Ariel Pereyra transformó en gol.
Sorprendido por la desventaja, River fue en busca del empate. Pero lo hizo del modo menos aconsejable: se repitió en la búsqueda aérea y facilitó el trabajo de la defensa de Gimnasia.
Pero como River, a falta de fútbol, casi siempre recurre a la contundencia ofensiva, sobre los 34' se encontró con el empate casi sin merecerlo. Tiro libre de Cardetti y una peinada casi imperceptible de Coudet llevó un poco de tranquilidad a los locales. Y cuando parecía que el primer tiempo se moría sin modificar su trámite trabado e impreciso, Ortega mandó un centro desde la derecha, José María Paz la bajó de cabeza hacia el medio y Saviola metió el frentazo goleador.
En el complemento, Gimnasia siguió buscando con sus limitaciones a cuestas y, como River no reaccionaba, comenzó a merodear el empate. Y a los 20, San Esteban puso el 2 a 2 con un tiro libre espectacular al ángulo izquierdo.
Golpeado, River fue por el triunfo pero sin claridad. A los 37' Hernán Díaz metió el cabezazo goleador que parecía definitivo, pero Gimnasia no se rindió y en tiempo de descuento San Esteban puso el 3 a 3.
El resultado estuvo bien y ahora River debe contestarse una pregunta para sostener sus ilusiones de salir campeón: ¿le alcanzará con tan poco fútbol?
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La Ciudad
