"Los que mataron al comerciante están sueltos, no fue nuestro hijo"

Los padres del joven detenido por el crimen de Sergio Brusa dicen que es un chivo expiatorio. Imploran que lo confronten en rueda de personas con la hija de la víctima y aducen persecución

“Lamentamos sinceramente que hayan matado a este comerciante de Empalme (Sergio Brusa) y nos gustaría hablar con su familia. Pero no es justo que nuestro hijo, que no tuvo nada que ver con eso, sea el chivo expiatorio y quede preso mientras los verdaderos responsables están sueltos”. Eso dijeron anoche a La Capital María Dominga y Daniel R. padres de Matías, el joven de 18 años que anteayer fue detenido por la policía por su presunta vinculación con el crimen cometido el lunes en Rouillón y Carrasco, cuando un hombre de 46 años fue asesinado en su casa tras recibir un balazo a quemarropa por la espalda, frente a su hija mayor.

   Ayer por la tarde, la jueza de Instrucción Nº 2, Alejandra Rodenas tomó declaración indagatoria a Matías R, el joven detenido en un procedimiento realizado en Bielsa al 6000.

   “Los policías llegaron a nuestra casa el miércoles a las ocho menos cuarto de la mañana y entraron con toda prepotencia”, contó Mari. Desmintió luego que a su hijo lo apoden El Chino . Y señaló que “hace menos de un mes fue detenido en la comisaría 12ª, acusado de robo a mano armada, donde tampoco tuvo nada que ver”.

   “Si mi hijo hubiera participado del homicidio de este comerciante no estaríamos saliendo a poner la cara para defenderlo”, agregaron antes de apuntar que “desde que lo dejaron salir en libertad hace como 10 días, lo único que hace es estar metido en casa todo el tiempo porque tiene miedo de salir a la calle”.



Redadas. Indicaron que desde que ocurrió el homicidio el lunes pasado, “la policía levanta a cualquier pibe que anda por el barrio”.

   Según fuentes allegadas a la investigación, el personal policial no secuestró en el domicilio de R. ningún elemento que contribuyera a probar su participación en el homicidio de Brusa.

   “Un sobrino nuestro se suicidó hace tres años para no sufrir el asedio policial. No queremos que a Matías le pase lo mismo. Por eso queremos que vaya a vivir a otro lugar”, comentaron los padres de R.

   “Cuando Matías estuvo detenido en la comisaría 12ª el mes pasado, el comisario Rodríguez nos advirtió que lo sacáramos de la ciudad, porque en cuanto lo viera en la calle o pasara cualquier cosa en la zona, lo iban a encerrar”, aseguraron.

   Trascartón, Mari señaló que el muchacho “hace menos de un mes denunció ante la Justicia que los policías de la comisaría 12 lo torturaron, lo golpearon y le pusieron una bolsa en la cabeza. Por eso ahora lo tienen apuntado”.

   Tanto la causa por presunta participación en un hecho de robo calificado como la denuncia de apremios ilegales contra personal policial de la seccional 12ª se tramita en el juzgado de Instrucción Nº 15 a cargo de Jorge Baclini.

   Los padres de Matías consideraron que a este joven “lo quieren exhibir como un trofeo para mostrarlo al barrio y hacer que las cosas se tranquilicen en Empalme”. Denunciaron que “la policía está deteniendo a cualquier perejil para mostrar que está haciendo algo”.

 

Que lo vean. Daniel pidió que la jueza haga una rueda de reconocimiento para que la hija mayor de Brusa, que se trabó en lucha con los delincuentes que entraron a su casa el lunes pasado, pueda ver a Matías allí. ”Esa chica dijo que nunca se iba a olvidar de los dos tipos que entraron en la casa. Queremos que vea a nuestro hijo porque entonces se probará que él no tuvo nada que ver”.

   Hasta el momento no hay una acusación formal hacia este joven, según dijo la abogada defensora del detenido, Susana Zulkarneinuff . “La policía se guió por el apodo para detenerlo y Matías no tiene ningún apodo”, señaló.

   La letrada indicó que el muchacho “está sorprendido y muy estresado por lo que le está pasando” y denunció que desde que fue detenido anteayer por la mañana hasta anoche “la policía lo tuvo sin comer y sin dormir”. l

María Dominga y Daniel, padres de Matías, ayer a la tarde en el acceso a los Tribunales. Dicen que la policía había anticipado a su hijo que “cuando pasara cualquier cosa en el barrio” lo detendrían.