La Trova Rosarina le puso el broche de oro al cierre de la Feria del Libro

Los temas de la Trova Rosarina, integrada por Adrián Abonizio, Jorge Fandermole y Rubén Goldín; y las melodías de Litto Nebbia le pusieron el broche de oro ayer a la Feria del Libro de Rosario, que este año fue visitada por cerca de 150 mil personas y ya se convirtió en la de mayor trascendencia en el país sólo superada por la de Capital Federal.

   Durante 12 días, los rosarinos pudieron disfrutar de una variada gama de actividades que se desarrollaron a lo largo de los 80 stands que coparon el Patio de la Madera.

   Hubo de todo y para todos los gustos y el público respondió como hasta ahora no se había visto. En total fueron cerca de 150 mil las almas que en esta edición recorrieron la feria y posicionaron al evento como el “más importante del país”, sólo superado por la Feria del Libro de Buenos Aires. Al menos eso era lo que coincidían en señalar los representantes de las distintas editoriales que este año formaron parte de la propuesta local.

   El cierre de ayer no pudo ser de otro modo. La Trova Rosarina salió a escena pocos minutos después de las 16 y se encargó de ponerle el sello local. Abonizio, Fandermole y Goldín repasaron los temas clásicos que ya son una marca registrada de la ciudad.

   Minutos después llegó al escenario otro rosarino emblemático: Litto Nebbia. Aquel que con Los Gatos Salvajes empezó a escribir la historia del rock nacional también dijo presente en la feria y se encargó de dejar su impronta en la jornada de cierre del evento.

   Por los stands, en tanto, también se pudo ver a distintos candidatos que el domingo próximo medirán sus fuerzas en las elecciones provinciales y municipales. Ninguno se quiso quedar afuera del cierre de la feria y aprovechó la oportunidad para seguir haciendo conocer su propuesta a los rosarinos.



Dibujos y Cuba. En el cierre también hubo espacio para los chicos, que se hicieron notar a la hora de comprar libros ya que el segmento infantil fue uno de los que más ventas registró. Ayer, y a pesar del frío que caracterizó todo el día, no fueron pocos los niños que se acercaron hasta el stand de Homo Sapiens a dibujar con Nana González.

   En rigor, las actividades para los chicos se desplegaron a lo largo de los doce días que duró la feria y siempre congregaron gran cantidad de público. Es más, el domingo pasado los locos bajitos se adueñaron del evento al ritmo de “El Regreso del Coelacanto”, la banda que los cautivó con temas de Bob Esponja, La Pantera Rosa y el Correcaminos.

   En el pabellón 3 se llevó adelante el “Día de Cuba”, hubo presentación de libros y hasta música típica.

   Así, la feria vivió su cierre y los organizadores ya trabajan en la próxima edición, que sin dudas volverá a congregar a una multitud.