Forman una comisión productores afectados por el canal Ibarlucea

En su mayoría perdieron todo. Piden que se inicien las obras y ser asistidos por el Estado

Marcelo Abram / La Capital

Ibarlucea.— El desborde del canal Ibarlucea, que recolecta aguas de los campos de una vasta región hacia el arroyo Ludeña, trajo un sinnúmero de problemas a pequeños emprendedores de la zona, que perdieron toda su producción. Por esa razón formaron una comisión después de que comprobaron el desastre que les quedó cuando las aguas se retiraron.

“El agua me llevó todo”, fue la frase común entre quienes impulsan la inquietud de ser recibidos por el gobernador Jorge Obeid a quien le solicitaron una audiencia para plantearle la necesidad de que comiencen rápidamente las obras de canalización del Ibarlucea y una indemnización del Estado provincial por lo perdido a raíz del temporal.

Un ejemplo de la situación es lo ocurrido en un criadero de peces ornamentales donde el desborde se llevó todo el emprendimiento familiar: más de 50 mil ejemplares de distintas especies.

Con el correr de los días comenzaron a aparecer dramáticas historias similares, entre ellas de criadores de cerdos, apicultores, quinteros y ladrilleros, que al bajar el agua no les quedó nada. También hay casos que se agravan con los días, como a un productor cuyas ovejas enfermaron de pulmonía y se van muriendo una tras otra.

David Ick, Rafael Prepiñá, Cristina Córdoba, Sergio Saco y Félix Insaurralde sostienen que “la necesidad primaria es que comiencen las obras en el cauce del canal, lo que traerá tranquilidad a nuestras familias y a las que trabajan con nosotros; como también a nuestros clientes, que están buscando provisiones en otras zonas, algo que por ahora y hasta que nos recuperemos no podremos hacer”.

La mayoría son casos de microemprendimientos que poco a poco fueron transformando en un polo aglutinante de este tipo de actividades a esta localidad. Varios coincidieron en remarcar que “todas nuestras producciones son de muy lenta reactivación porque dependemos de las estaciones, el clima, ciclos biológicos y de esperar su natural desarrollo y crecimiento, lo que hace muy dificultosa nuestra recuperación”.

El desborde del canal Ibarlucea también afectó las viviendas de los productores, que viven junto a sus emprrendimientos.