Ofensiva policial contra narcos en Rio de Janeiro deja 25 muertos

Rio de Janeiro.- La policía militar brasileña realizó hoy nuevos operativos en favelas cariocas, en lo que constituyó el día más violento del año en Rio de Janeiro, donde desde la noche del lunes hasta esta mañana murieron 25 personas en tiroteos entre presuntos narcotraficantes y fuerzas de seguridad.

En el marco de una ofensiva contra el crimen organizado, la policía ocupó desde hoy y “por tiempo indeterminado” el morro da Mineira, en centro de la ciudad, donde los enfrentamientos entre grupos narcontraficantes rivales y la posterior represión policial causaron 13 muertos, todos ellos “criminales”, dijeron las fuerzas de seguridad.

El número de abatidos en los enfrentamientos registrados entre anoche y la mañana de hoy en la región metropolitana de Río llega a 25, con la muerte de cinco personas en nuevos tiroteos en los suburbios de la capital turística de Brasil.

La policía también desplegó hoy unos 150 efectivos y un helicóptero en favelas de Copacabana, para la búsqueda de delincuentes, armas y drogas, indicó esa fuerza, luego de que en ese sector esta mañana se registraron tiroteos.

De los 13 muertos en los tiroteos de Mineira, la mayoría llegó sin vida al hospital municipal Souza Aguiar en un vehículo blindado de la policía militar, conocido popularmente como Caveirao, según reportes de la prensa local.

La ofensiva policial comenzó horas después de que el lunes se reunieran el gobernador de Rio, Sérgio Cabral, con los ministros de Defensa y Justicia y los comandantes de las Fuerzas Armadas.

Durante el encuentro el gobernador y las autoridades castrenses precisaron la “colaboración” militar autorizada por el presidente, Luiz Inácio Lula Da Silva, a sólo tres meses de la realización de los Juegos Panamericanos en esta ciudad.

Los tiroteos de ayer se concentraron en la región del morro de Mineira, donde según pobladores del lugar son frecuentes los enfrentamientos entre organizaciones rivales del narcotráfico Comando Vermelho y Amigos de los Amigos.

“Estamos acostumbrados a ver hombres armados en el morro, pero los tiroteos de ayer fueron demasiado. Nadie pudo salir de las casas para ir a trabajar. Los disparos duraron unas seis horas”, relató Tania Silva Moraes, de 35 años, oriunda del estado de Minas Gerais.

Durante la ofensiva policial en el lugar, los efectivos acorralaron a los supuestos criminales en el interior del cementerio de Catumbi, donde intentaron esconderse.

“Ya no podemos ni enterrar tranquilos a nuestros muertos”, dijo hoy uno de los familiares que acompañaba el entierro de una mujer, y en el que irrumpió un presunto narcotraficante.

“Un hombre llegó y le pidió a mi tío que lo dejara esconderse en la sala donde velábamos a mi abuela”, relató Marco Freire.

Freire comentó a la prensa local que, “cuando comenzaron los disparos, los empleados del cementerio dejaron el cuerpo de mi abuela y se escondieron en el baño”.

La cifra de muertos en tiroteos en Rio en menos de 48 horas superó a las 23 víctimas, registradas en la serie de ataques a objetivos policiales atribuidos al crimen organizado, al accionar de milicias parapoliciales y posterior represión, que azotaron la ciudad en los cuatro últimos días de 2006.

La prensa local destaca hoy con grandes titulares la “guerra” desatada desde ayer en las calles de Rio de Janeiro.

“Un día en que el narcotráfico paró la ciudad”, tituló el diario O Dia, sobre el “terror” en el barrio Catumbi, zona central de Rio, donde balas perdidas de los tiroteos alcanzaron a dos personas que pasaban por las calles y a un hombre, baleado en la cabeza mientras se dirigía a su trabajo en ómnibus.

“¿Hasta cuándo?”, subrayó Jornal do Brasil en primera página, antes de resumir los hechos de violencia que asolaron Rio todo el martes. “La ciudad fue sometida de nuevo a la anarquía comandada por narcotraficantes”, subrayó.

La nueva jornada de violencia comenzó en la madrugada de ayer con la muerte de cinco presuntos narcos, y un adolescente de 16 años en una favela de Bangu, en la zona oeste de la ciudad, en un tiroteo con la policía militar.

“Un Rio rehén de las balas”, tituló en primera plana el diario O Globo, en una nota ilustrada con fotografías de un policía en posición de tiro frente a un cuerpo que era velado en un cementerio, y otra de una niña en su intento de protegerse de los disparos en una calle de la ciudad. (Télam)