Inglaterra se quedó sin su soñada boda real

El príncipe Guillermo se separó de su novia Kate. No quiere repetir el error de su padre Carlos

Londres. - Se anunciaba como la boda de un cuento de hadas que sería la envidia del mundo y reviviría el alicaído entusiasmo de los británicos por la monarquía. Pero el sueño se terminó. Aquellos súbditos que ya habían tejido las servilletas conmemorativas y pulido la vajilla anticipando la boda real tendrán que guardarlas para siempre.

El repentino final de la relación que durante seis años unió al príncipe Guillermo de Inglaterra, de 24 años, y su novia de la universidad, Kate Middleton, de 25, sorprendió incluso a los más experimentados observadores de la casa real. La perspectiva de un enlace entre Guillermo, segundo en la sucesión al trono e hijo de la princesa Diana, con una mujer de clase media con los pies en la tierra había entusiasmado a la nación y era una segunda oportunidad para la desacreditada monarquía británica.

Los motivos de la separación podrían radicar en la intensa atención mediática que persiguió a Kate desde que el año pasado se trasladó a Londres para trabajar en una gran casa de moda. En la universidad escocesa de Saint Andrews, donde se conocieron en 2001, ella y Guillermo disfrutaron de una "luna de miel", libres de la persecución de la prensa. En cambio, en su cumpleaños 25, Kate fue perseguida por un grupo de fotógrafos, en una situación que Guillermo comparó con las que sufrió su madre Diana, muerta en un accidente de tránsito en París en 1997 cuando huía a toda velocidad de los "paparazzi".


Se veían poco
Pero además de la presión mediática hubo otros factores que explican la separación La pareja no se veía más de una vez a la semana desde que Guillermo se trasladara hace un mes de Londres a Dorset en el suroeste del Reino Unido para recibir entrenamiento militar Guillermo eligió la carrera militar luego de dejar la universidad El joven fue visto frecuentemente en compañía de chicas en lo bares de Bornemouth una ciudad costera del sur Ella está bloqueada en Londres mientras el vive la vida loca de un militar en Dorset comentó un presunto amigo de la pareja al tabloide popular Sun

Se cree que Guillermo está decidido a no repetir el error de su padre, el príncipe Carlos, que condujo al espectacular derrumbe de su matrimonio con Diana, la que sólo contaba 19 años cuando se casó con él en 1981.