Año CXXXVII Nº 49429
La Ciudad
La Región
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Economía
Escenario
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 25/03
Mujer 25/03
Economía 25/03
Señales 25/03
Educación 24/03
Salud 21/03
Página Solidaria 21/03

contacto
servicios
Institucional


 domingo, 01 de abril de 2007  
Las tratativas por Malvinas, de mal en peor
La Rosada dice que es Gran Bretaña la que festejará el 14 de junio. No habrá acto conjunto

"Se cumplen 25 años de la negativa de Gran Bretaña a negociar la disputa por la soberanía de las Islas Malvinas", es la síntesis que hacen en el gobierno de Néstor Kirchner para significar el cuarto de siglo desde la guerra del Atlántico Sur, que provocó la muerte de 649 soldados argentinos y 250 ingleses.

El gobierno nacional no realizará "celebraciones" fuera de lo tradicional porque considera que es el Reino Unido, ya sea en Londres o en las usurpadas islas del Atlántico Sur, "el que va a festejar" el 14 de junio, cuando logró la rendición de las fuerzas argentinas en el archipiélago.

También defiende su decisión de no compartir ningún acto con el gobierno británico, el mismo que se niega sistemáticamente y pese a las reiteradas resoluciones de las Naciones Unidas a sentarse a negociar por Malvinas.

La Casa Rosada y el Palacio San Martín, el ala política y diplomática del gobierno, comparten los mismos términos: la administración de Tony Blair tuvo algo que ver en la ofensiva antiargentina que se vio reflejada en varios medios de prensa británicos en los últimos días, cuando hablaron de la amenaza del gobierno de Kirchner, de una posible segunda invasión y otras cuestiones.

"Para qué vamos a compartir un acto que el Reino Unido presenta como el triunfo y el fin de la disputa por Malvinas a partir de su victoria en el conflicto. Además, nosotros somos los malos. Al menos así nos presentaron en la prensa británica, pero son ellos que se niegan a respetar a las Naciones Unidas", se escuchó decir a un alto funcionario.

Y para dejarlo claro, sostuvo: "No hay que confundir firmeza con agresión. Lo nuestro es firmeza y nos queremos remontar a los 70, cuando había una excelente dinámica de negociación entre ambos países y una aceitada relación entre las islas y el continente".

Hoy por hoy el reclamo de soberanía no ha avanzado un ápice, y sólo se estima que podría hacerlo si Gran Bretaña cediera a la intransigencia de negociar. Está claro que, así como en Argentina es un año electoral, también habrá a mitad de año comicios regionales en el Reino Unido.

No obstante, el gobierno nacional pegó dos veces en menos de 48 horas esta semana: primero, al dar por finalizado un acuerdo de cooperación en materia de hidrocarburos en las islas. Y a los dos días, al anunciar sanciones para las empresas que operen en el Atlántico Sur con un permiso de los isleños y no de la administración de Néstor Kirchner.

¿Casualidad? En absoluto. La Casa Rosada quiere dejar en claro que hay una disputa que el triunfo bélico de 1982 no puede soslayar y que la Argentina continuará reclamando por la vía dura la soberanía de las islas y no habrá ninguna "política de seducción" como en los 90.

Hay otro ítem que puede profundizar la disputa: la pesca. Los isleños, con la anuencia de la administración de Blair, agudizaron los roces a partir de la decisión de comercializar por 25 años las licencias de pesca en el área delimitada unilateralmente por Gran Bretaña como zona de exclusión.

El hecho de que los recursos ictícolas en el caso de algunas especies disminuyeran peligrosamente, agravó el problema. Por eso no fue casual que las reuniones de la comisión de pesca argentino-británica estuviera suspendida durante varios meses.

Hay en el Congreso un proyecto que podría ser aprobado en las próximas semanas y que promueve las sanciones a aquéllas empresas que adquieran las licencias para pescar en "una zona en disputa".

En el caso de los vuelos charter, que fueron suspendidos en noviembre de 2003, si bien la falta de ellos afecta a los kelpers aún no ha significado un real problema como para retomar las conversiones que en 2004 estuvieron a punto de arribar a una solución pero que no se plasmó porque los isleños rechazaron que los aviones provinieran de una línea aérea argentina. Querían una empresa de cualquier otro país menos la Argentina.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Notas Relacionadas
¿Va o no va?

Entre la ignorancia y el amor a la patria

Neutralizando misiles con máquinas de hacer fideos


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados