El nivel del Ludueña bajó y cesó el alerta

Los vecinos se tranquilizaron cuando al mediodía de ayer el agua descendió 60 centímetros

Casi pasaron la noche en vela con la atención puesta en los niveles del arroyo Ludueña, que en los últimos días los mantuvo alerta y con todo listo para escapar del agua en caso de desborde. Pero recién ayer, ya sobre el mediodía, los vecinos de los barrios de la zona noroeste pudieron respirar tranquilos, cuando el agua bajó 60 centímetros y se estabilizó.

Los habitantes de los barrios 7 de Septiembre, Stella Maris y sobre todo Hostal del Este, Empalme Graneros y Lisandro de la Torre, hace días que están en vilo, pero el viernes la desesperación llegó a su punto máximo cuando el propio intendente Miguel Lifschitz les pidió que permanecieran en sus casas, pero "atentos por si hace falta evacuar esas zonas".

Y el alerta no era para menos, ya que el arroyo había crecido 1,30 metros en 12 horas y a ese ritmo el desborde era inminente. Es más, desde el Palacio Municipal indicaban que en su nivel máximo "estuvo a sólo 30 centímetros del límite".


Con un ojo
En medio del alerta anteanoche se hacía difícil dormir en los barrios del noroeste rosarino Los vecinos estaban en vilo y con la mirada puesta en los niveles del arroyo que alcanzó su pico máximo a las 22 del viernes con más de 5,30 metros

Los vecinos de los alrededores del Bosque de los Constituyentes decían estar "tranquilos, pero atentos". Habían recibido la advertencia del municipio y estaban todos "preparados" para el caso que tuvieran que abandonar sus viviendas.

Algo similar pasaba en los barrios privados de la zona, como Aldea, y en las viviendas de los alrededores del autódromo. Las calles se hacían difíciles de transitar porque el agua de la lluvia no escurría e incluso los jardines de las casas ya no se veía el césped. Más adelante, ya sobre la ruta 9, el agua estaba dentro de las viviendas.

La preocupación se mantenía no sólo porque pudiera haber nuevas lluvias en la ciudad, sino porque "la caída de agua en cualquier otra localidad sobre el su cauce podría haber terminado produciendo el desborde", explicaron desde el municipio.


Buena noticia
Mientras los vecinos continuaban en alerta las autoridades comenzaron a tener un poco más de tranquilidad cuando el crecimiento comenzó a darse de a un centímetro hasta que finalmente se estabilizó ya entrada la noche

Fue recién sobre el mediodía de ayer, luego de varias horas sin lluvia, que llegaron la buenas noticias. Desde el municipio aseguraron no sólo que el nivel del arroyo se había estabilizado, sino que además había descendido 60 centímetros.

Es más, a través de un comunicado, se detallaba que no se habían producido ningún tipo de desbordes y que no había barrios afectados. Así, después de cinco días de lluvia sin tregua, los vecinos respiran un poco más de tranquilidad.