Un golpe con antecedentes

No es la primera vez que audaces ladrones ingresan de noche a edificios del centro de la ciudad para robar en diferentes oficinas, aunque la modalidad cambie.

El último registro data del 5 de junio del año pasado cuando al menos tres hombres armados irrumpieron en un inmueble de Corrientes 861, y, luego de encerrar al portero en un baño, se dedicaron a recorrer las oficinas ubicadas en el 7º piso. Los intrusos ingresaron en tres despachos e incluso violentaron una caja fuerte con una amoladora pero no lograron llevarse la cantidad de dinero que buscaban y debieron conformarse con unos pocos pesos, un televisor y una cámara digital de una empresa gastronómica, entre otros efectos.

Otro hecho resonante y de características similares ocurrió el 17 de marzo de 2005 en el edificio de Molinos Fénix, ubicado en peatonal Córdoba 1437. Allí, cinco ladrones sorprendieron al portero en su vivienda, que está en el último piso de los 5 que tiene el inmueble, y lo redujeron junto a su familia. Tras ello recorrieron al menos 14 oficinas y se alzaron con unos 5 mil pesos en efectivo.