Fin de la agonía para una nena violada y golpeada en su casa

Tenía 5 años y su madre la halló el jueves en el patio de su humilde vivienda. Una trágica historia de familia

Santa Fe.- Daiana Micaela Sarasino, la nena de 5 años que hace una semana fue encontrada en el patio de su humilde vivienda golpeada y con evidentes signos de violación, falleció ayer en el Hospital de Niños de esta ciudad. Así llegó al final la corta y atormentada vida de una niña sobre quien ya estaban puestos los ojos de la Justicia, que desde hace tres años tramitaba un pedido de tenencia por parte de su padre biológico ante el estado de abandono y maltratos en el que vivía la víctima, situación comprobada por los mismos asistentes sociales enviados desde tribunales. Pero los investigadores llegaron tarde y ayer, cuando la nena era velada, el juez de Instrucción Rubén Saurín ordenó detener a su madre. En tanto, el otro apresado por la agresión seguía siendo anoche un cartonero de 51 años, pareja de la abuela de la menor.

La pequeña Daiana ingresó al Hospital de Niños en brazos de su propia madre el jueves de la semana pasada. La mujer, llamada Noemí y de 25 años, la había levantado del patio de tierra de su casa del barrio Alfonso. Allí la halló bañada en sangre y con el cráneo destrozado. Además, tenía visibles signos de haber sido ultrajada sexualmente. Los exámenes fueron peores: la chica tenía fractura y hundimiento del parietal derecho y confirmaron que era abusada desde hace unos dos años.

Tras cuatro días de agonía, la noche del lunes los médicos desconectaron el respirador artificial al que la pequeña se ataba a la vida. Lo autorizaron los familiares de Daiana, quienes donaron sus órganos.

Mientras la nena agonizaba, su historia empezó a conocerse en los tribunales santafesinos. Así se supo que hace un año su padre biológico había iniciado un expediente en el Tribunal de Familia Colegiado número 2 solicitando la tenencia de su hija y de su otro niño, de 7 años. Pero la Justicia tiene tiempos diferentes a las realidades sociales. Entonces, mientras el trámite seguía su curso en la letra fría de los papeles, la pequeña fue ultrajada y golpeada una vez más en su vida. Pero esta vez su pequeño cuerpito no resistió el ataque.

Según manifestó ayer el abogado Andrés Mussin, representante del padre de Daiana, "siempre se estuvo ante la posibilidad de que ocurriera un hecho tan grave como éste y en no pocas ocasiones se insistió ante la Justicia. Incluso en 2004 una asistente social comprobó las malas condiciones en que vivía la nena".


Una sórdida historia
La corta vida de Daiana estuvo signada no sólo por la humildad sino también por la violencia familiar. Ayer, una de sus tías relató que la pequeña vivió con su papá hasta que cumplió 1 año y medio, pero después se la llevó su mamá. "Desde entonces, cada vez que volvía a la casa del padre lo hacía en condiciones lamentables, golpeada, sucia, con quemaduras de cigarrillos. Nunca quería irse de la casa de su papá y volver con su madre", reveló la mujer.

Respecto a la familia de la chica, se supo que el día del hecho su madre había salido junto a una amiga hacia el centro de la ciudad presuntamente "para ejercer la prostitución". A cargo de la menor quedó un vecino pero también estaban en el lugar la abuela Mirta, de 46 años, y su pareja, un cartonero de 51 que poco después fue visto escapar por un terraplén.

El relato de un testigo fue precisamente el que llevó a la policía hasta el cartonero, en cuya casa se hallaron prendas manchadas con sangre y otros fluídos que ahora se analizan para saber si corresponden a la pequeña víctima.