Buscan en Andino restos de una desaparecida durante la dictadura

La provincia investiga un confuso episodio de 1977, cuando el cuerpo de una joven fue enterrado como NN

Marcelo Abram / La Capital

Andino.- La directora para la Reconstrucción de la Memoria Histórica, Beatriz Pfeiffer, que depende de la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, investiga en el cementerio de esta localidad el presunto enterramiento del cadáver de una mujer que en su momento fue inhumada bajo la denominación de NN, que podría pertenecer a una desaparecida durante el último proceso militar.

En este caso no se trataría de un hecho clandestino sino de un confuso episodio que se produjo en 1977 a raíz de la aparición del cuerpo de una mujer asesinada, de la cual en un principio se pensó que se trataba de una joven de la localidad.

El suceso que sacudió la tradicional tranquilidad de este pueblo del departamento Iriondo se registró a mediados de ese año, en pleno auge del terrorismo de Estado, cuando en el viejo Camino del Espinillo -que era el antiguo ingreso a Andino antes de que se pavimentara la ruta S-26- apareció el cadáver de una joven con una herida de bala.

Los rasgos físicos de la malograda mujer coincidían con la descripción de otra que poco tiempo antes había desaparecido de su hogar en la localidad. Incluso, el cuerpo fue reconocido por algunos de sus familiares en la comisaría local, salvo su madre que siempre negó que se tratara de su hija.

A pesar de eso la inhumación se produjo en un espacio destinado a los fallecidos registrados como NN y en los libros archivados en la comuna está asentado bajo la denominación de "NN (Ferreira)".

Sin embargo, grande fue la sorpresa cuando después de algún tiempo se supo que la desaparecida era María Ferreira y se encontraba con vida en la provincia de Córdoba, a donde se había trasladado por cuestiones familiares, luego de lo cual regresó a Andino.

Si bien la novedad sirvió para aclarar la situación de la familia Ferreira, nunca se pudo saber la identidad ni la procedencia de la muchacha rubia, de ojos claros, de poco más de 20 años de edad, que la policía había encontrado asesinada en el camino rural tristemente célebre por la cantidad de cadáveres que allí se han arrojado.

Si bien la existencia de tumbas NN en la necrópolis de Andino fue denunciada ante el Ministerio de Gobierno de la provincia en 1983 a poco de asumir en el período democrático el presidente comunal Oscar Pagnucco, recién ahora y en el marco de una investigación impulsada por el gobernador Jorge Obeid en todos los cementerios santafesinos, podría comenzar a revelarse una más de las tantas incógnitas que dejó la represión militar.

Luego de que la confirmación de enterramientos clandestinos en el cementerio de San Lorenzo actuara como disparador, el gobierno provincial decidió poner bajo investigación todas las necrópolis en el territorio santafesino.

En este caso no se trata de un hecho clandestino, pero como con el paso del tiempo no quedaron vestigios de las tumbas NN sólo se tiene una ligera idea del sector donde podría estar sepultados los restos de la infortunada muchacha.

Ante esta situación, Pfeiffer sostuvo que va a derivar el caso a la Justicia federal para que se ordene la localización, exhumación e identificación del cuerpo enterrado en el cementerio de Andino.

"El gobierno está haciendo un relevamiento de todos los cementerios de Santa Fe con el objetivo de esclarecer al máximo qué pasó durante la dictadura en nuestra provincia", afirmó Pfeiffer, tras aclarar que "en este caso puntual vamos a remitir todo a la Justicia federal para que actúe como corresponde".

Además de recorrer el viejo cementerio junto a las autoridades comunales, la funcionaria revisó los libros archivados en la comuna y solicitó a la comisaría local la búsqueda de registros que se refieran al hecho para sumarlos al expediente.

Al referirse al episodio, el presidente comunal Oscar Pagnucco recordó que "la aparición de la chica muerta en el Camino del Espinillo fue un hecho que conmovió a todo el pueblo" y consideró que "se trata de un caso que lamentablemente era muy común en esa época de la desaparición de personas".

Por otra parte, Pagnucco señaló que "estamos tratando de establecer con más precisión la fecha en que se encontró el cuerpo para poder tener un punto de partida desde el cual poder investigar y además localizar con la mayor exactitud posible el sector del cementerio, porque transcurrió demasiado tiempo y no hay ninguna cruz o placa que nos sirva de referencia".

La necrópolis encierra el misterio de un episodio a raiz de la aparición del cuerpo de una mujer asesinada.