El otro homicidio del empresario

La fiscal Gabriela Baigún se tomó ayer una revancha al lograr la condena de Horacio Conzi, ya que en 1995 ambos se enfrentaron judicialmente cuando el empresario gastronómico mató por primera vez pero fue sobreseído. La víctima de aquel hecho fue un joven llamado José Nazareno Riquelme que, según la investigación, asaltó a Conzi junto a dos cómplices y terminó muerto a balazos por el empresario, en aquel entonces dueño de una estación de servicio en San Isidro. El incidente se produjo el 24 de octubre de 1995. Conzi estaba a bordo de un automóvil BMW negro con el que, al igual que en el caso Schenone, participó de una persecución y mató a la víctima a balazos. El juez de la causa fue Juan Makintach, quien en febrero de 1996 sobreseyó a Conzi al considerar que había cometido un homicidio en legítima defensa. Sin embargo, Baigún, en aquel momento fiscal de instrucción, apeló esa decisión porque consideraba que, salvo por sus propios dichos, no estaba probado que Conzi haya sido amenazado o asaltado e incluso mató a Riquelme por la espalda. Finalmente, la Cámara de Apelaciones confirmó el sobreseimiento del empresario. En su alegato en el juicio oral que culminó ayer, Baigún recordó este caso en dos oportunidades: cuando mencionó que Conzi volvió a matar con una pistola Pietro Beretta calibre nueve milímetros y cuando dijo que, a diferencia de lo que pasó en el caso Dallas, en la indagatoria por el crimen de Riquelme estaba lúcido y ubicado en tiempo y espacio.