Igualdad aburrida y sin goles entre Instituto y Banfield

La notable actuación de Cristián Lucchetti evitó que Instituto consiguiera la victoria que mereció ayer frente a Banfield. El partido terminó empatado sin goles por obra y gracia de las atajadas del arquero banfileño. De esta manera, fue el sexto empate sin tantos de los cordobeses como locales sobre ocho partidos disputados. Pese a que ya no está Jorge Theiler sentado en el banco, el equipo sigue resignando puntos importantes en la lucha por evitar la promoción.

El partido fue apenas discreto, con mayor ambición de Instituto, que careció de precisión en los últimos metros para vulnerar la resistencia de Lucchetti, la figura de la cancha.

Los volantes Barrientos y Raponi fueron los que tuvieron más movilidad y armaron las jugadas de riesgo. Pero siempre se interpuso la gran figura del Laucha, quien está atravesando un gran momento.

Lucchetti le tapó cinco mano a mano a Arrieta y Bergessio, y cuando él no pudo lo salvó el palo y después su compañero Paletta, quien también tuvo una gran tarde.

Durante varios momentos el trámite tuvo a un dominador y a un dominado. Instituto hizo méritos para quedarse con una recompensa mayor que la de un discreto empate, que no lo ayuda demasiado en la tabla de los promedios.

En cambio, la idea de Banfield fue muy clara. Salió a cuidarse sin regalar el mínimo espacio para que se filtrara el rival. Tal es así que la única carta interesante que expuso fue el contraataque, situación que muy pocas veces pudo concretar porque sus delanteros no gozaron de muchas oportunidades para convertir. Sólo Sand inquietó algunas veces, pero nunca en la misma proporción en que lo hicieron los delanteros de la Gloria.

En el balance final Instituto fue mejor. Pero no pudo canjear esa superioridad en el arco rival. Es que se encontró con un escollo granítico: el arquero Lucchetti.