En silencio, Kirchner define los cambios en el gabinete

El presidente Néstor Kirchner evaluó ayer en Río Gallegos, junto a su círculo más cercano y en silencio, los cambios que realizará en el gabinete tras las elecciones legislativas del 23 de octubre pasado.

Su esposa, la senadora nacional Cristina Fernández de Kirchner, y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, fueron de la partida en las reuniones donde se analizaron los futuros integrantes del equipo que acompaña al jefe del Estado.

Lo cierto es que desde que arribó (el viernes) a la villa turística santacruceña, el presidente Kirchner se mantuvo en su residencia junto al resto de sus acompañantes.

Fernández, ante una consulta de los periodistas que, expectantes por algún anuncio referido a la nueva etapa de gestión, montaban guardia frente a la residencia, señaló al ingresar al lugar: "No tengo nada para decir".

El presidente viajó a su provincia natal para analizar los reemplazos de, entre otros, los ministros de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; de Defensa, José Pampuro, y de Relaciones Exteriores, Rafael Bielsa. Los tres fueron electos legisladores y deberán ocupar una banca a partir del 10 de diciembre.

No se descarta que Kirchner y sus colaboradores hayan evaluado, además, el crítico documento dado a conocer ayer por la Iglesia referido a la situación social del país.