Que Maradona viva como los cubanos

Quienes hemos tenido la oportunidad de conocer Cuba y contamos con cierta sensibilidad social, no pudimos abstraernos solamente a sus playas increíbles y a la amabilidad de su gente. Por eso, nadie que haya podido disfrutar de la democracia y de la libertad puede sentirse feliz con lo que se vio el lunes pasado en el programa de televisión de Maradona. No me siento representada por él y sinceramente me indignó que llevara al encuentro con su “amigo” Fidel Castro un regalo “en representación del pueblo argentino”. Me encantaría verlo a Maradona vivir en el régimen que aparentemente aplaude sin los dólares que acarrea consigo cada vez que visita esas tierras. Me gustaría que viva como lo hacen los cubanos, sin libertad de movimientos ni de pensamiento, estancándose en una vida sin futuro y fundamentalmente viendo cómo todo se derrumba (textualmente) a su alrededor. Por eso, señor Maradona, esta carta es para informarle que no me representa en lo absoluto y sé fehacientemente que el mío es el sentir de muchos argentinos.

Silvia Panero

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