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domingo,
06 de
noviembre de
2005 |
La mezcla enriquece
Ex canallas y leprosos jugaron un clásico, pero juntos
Gustavo Conti / Ovación
"Ojalá la gente pudiera sentirlo de esta manera. Nosotros éramos rivales, pero diferenciamos las cosas y después podías forjar una amistad. En las tribunas debería ser igual". Jorge Remigio Pautasso expresó con claridad las sensaciones que lo embargaron luego de vivir una noche especial, en la que una treintena de ex jugadores de Newell's y Central se juntaron el viernes por la noche en el club Provincial, como parte de los festejos de los 100 años de la Rosarina, dejando un mensaje pacificador: la convivencia siempre es posible más allá de las banderas.
El conocido dirigente local Raúl Moretti los convocó en nombre de la ARF y casi todo el mundo dijo presente, en el marco de una mega jornada deportiva, recreativa y de turismo organizada por el club del Parque.
"Sí, somos un montón, pero entre todos no hacemos once", dijo con picardía Jorge Díaz, ese habilidoso ex canalla que aún es. Sergio Almirón, uno de los últimos en llegar, lleva tan adentro la rojinegra que propuso una última moción de dividir los equipos de acuerdo a los pasados leprosos y canallas. Pero los hermanos Killer no sabrían bien por quién jugar, y se mezclaron. Los rojos con la conducción del Mono Obberti, y los blancos con la de la dupla Machetti-Craiyacich.
"Qué emoción, al fin pude jugar con el Tata Martino", dijo feliz el Oso Ferrero, que se tomó las cosas en serio y se tapó todo, como sus colegas, el infiltrado Manolo Arrabal y Sergio Protti, mientras el Gato Andrada guardó banco. Ghielmetti, Tapita García, el Pollo Stachiotti, el Pitufo Grioni, Hijitus Gómez, el Pelado Boggio, Petete Rodríguez, Santoro, el Cuí Daniele, Rubinich, Galloni, Gori y Gerardo González no escatimaron esfuerzos para parecerse a los que fueron y regodear a la escasa concurrencia, producto de la mala difusión previa. Ellos hicieron lo suyo, el clásico de la paz siempre es posible.
G.C.
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Fotos
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El equipo blanco, con el Tata como emblema, juntó a leprosos y canallas.
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