Saint Liam triunfó en el Classic con autoridad

El favorito superó por 1 cuerpo a Flower Alley

Con autoridad, Saint Liam se quedó con la versión "Classic" de la millonaria serie Breeder's Cup, denominada la Copa Mundial quina disputada ayer en la pista de Belmont Park, mostrando sus credenciales para ser seleccionado como el "Caballo del año".

El pensionista de Richard Dutrow Jr. superó por 1 cuerpo a Flower Alley, mientras tercero finalizó Perfect Drift el cabo de 2' 01'' 49c para los dos dos kilómetros. Saint Liam arribó a la carrera mejor rentada de la serie como favorito al conocerse la deserción a último momento de Rock Hard Ten, que sufrió una lesión en el vaso de su mano derecha, y quien aparecía como uno de los probables definidores. Sobre esa ausencia Richard Mandella, el trainer de Rock Hard Ten había indicado: "Estoy decepcionado. Después de tanto trabajo que todo termine así es una desgracia".

Por su parte, tanto el neocelandés Starcraft que venía del continente europeo precedido de buena fama (aunque nunca había corrido en la arena), como el americano Borrego, quien había obtenido la Jockey Club Gold Cup en esta misma pista, concretaron una floja actuación arribando 7º y 10º respectivamente.

Saint Liam resultó un justo vencedor y posibilitó que el jinete Jerry Bailey alcanzara su 5º victoria en el "Classic" y la 15ª en la Copa de Criadores. En el trámite, Saint Liam tomó la delantera ingresando a la recta final y aguantó la atropellada final de Flower Alley.

"Fuimos afortunados", dijo el entrenador Richard Dutrow (h). "No podría estar más contento", agregó sobre su caballo que se convirtió en el segundo favorito consecutivo que gana la gema de la Copa de Criadores, un evento de ocho carreras que reparte más de 15 millones de dólares en premios.

Con esta brillante conquista, parece ser que el único rival de Saint Liam en la carrera para coronarse como "Caballo del Año" es Afleet Alex, ganador del Preakness y el Belmont, pero que no ha corrido en casi cinco meses y tampoco fue de la partida ayer en el "Classic".

Por último, el entrenador Richard Dutrow (h) expresó: "Tenemos el mejor caballo. No nos escondimos de ninguno", mientras era asediado por numerosos reporteros y allegados al ejemplar que consiguió el éxito más trascendental de su campaña.