Anularon la licitación del penal federal de Coronda

El proyecto de construcción de la cárcel federal de Coronda está signado por un maleficio. El gobierno nacional anuló la licitación para levantar ese penal y retrotrajo a foja cero la iniciativa que ya lleva una década de dilaciones. Otros dos presidios incluidos en el programa, a gestarse con fondos de la Nación, también quedaron aplazados. Son los penales de Güemes, en Salta, y el de Mercedes, en Buenos Aires.

El Ministerio de Planificación Federal interrumpió el proceso licitatorio de los tres presidios. El argumento vertido desde la cartera encabezada por Julio de Vido es que hubo deficiencias en la evaluación de las ofertas y en las preadjudicaciones del contrato. El gobernador Jorge Obeid, en junio del año pasado, había acudido a Buenos Aires a la apertura de sobres del concurso licitatorio.

"Es una frustración que presupone más pérdida de tiempo", dijo a La Capital el subsecretario de Asuntos Penales de la provincia, José Luis Benaglia. Hasta donde sabe el funcionario, la provincia no recibió una notificación de la Nación acerca de la nueva postergación.

El de Coronda es un proyecto largamente esperado por Santa Fe, que desde hace años sufre la saturación de sus penales y, en esas condiciones, alberga por convenios a presos de jurisdicción nacional, debido a la ausencia de cárceles federales en territorio provincial.

Según detalló ayer el diario Clarín, la anulación no responde a irregularidades técnicas ni a sobrevaluación de los proyectos, sino a contradicciones en la valoración de las propuestas de parte del Ministerio de Justicia, efectuadas durante las gestiones de Gustavo Béliz y Horacio Rosatti.

En junio de 2004 se abrieron los sobres con propuestas para levantar el penal en Coronda. Y luego se preadjudicó la obra los consorcios Eleprint SA y Emaco SA. El proyecto tenía un presupuesto de 25 millones de pesos y un plazo de ejecución de 23 meses. En un acto al que asistió el gobernador Jorge Obeid se presentaron 11 ofertas. Según los detalles técnicos, se anunciaba que la nueva cárcel tendría una capacidad de 352 plazas, de las cuales 336 serán para un instituto federal y 16 para un instituto abierto. Asimismo, tras la construcción, a la adjudicataria se le delegaba por 60 meses el mantenimiento.