La crisis política en Brasil llevó al vicepresidente a renunciar a su partido

José Alencar dejó el Partido Liberal, primera formación centrista en aliarse con Lula cuando era candidato

Brasilia. - El vicepresidente de Brasil, José Alencar, abandonó las filas del Partido Liberal (PL) ante las denuncias de corrupción que acosan a dirigentes de esa formación y en desacuerdo con las tentativas del partido para abandonar la desacreditada coalición de gobierno del presidente Lula. En tanto, ayer el Partido de los Trabajadores (PT) de Lula sufrió un revés, al no poder expulsar a su ex tesorero, Delubio Soares, beneficiado con una medida cautelar judicial. Soares era una figura clave en el esquema de distribución de fondos ilícitos montado por el PT.

La renuncia al PL fue anunciada por el propio Alencar, un rico empresario de 73 años. Dijo que el presidente Lula fue informado de su decisión, que no implica ningún desajuste en el equipo del poder ejecutivo, pero sí un golpe para la ya frágil base de sustentación legislativa con la que cuenta el gobierno.

"Nunca tuve la intención de dejar el partido, pero esta situación que se va agravando, esta crisis política nacional, me ha traído grandes contrariedades e incomodidad", dijo Alencar en declaraciones difundidas por el servicio oficial de noticias Agencia Brasil. "No me estoy afiliando a ningún otro partido, sólo estoy desafiliándome del PL", añadió Alencar, quien, además de vicepresidente, también es ministro de la Defensa.

Indicó que si el PL decidiera salir de la coalición oficialista de ocho partidos "estará en plena libertad para eso, pero yo no estaré más en el partido, ya que soy el vicepresidente de la república", cargo que no abandonará.

Las tensiones entre Alencar y el PL se desataron el 31 de agosto en una reunión de la dirección nacional, cuando el vicepresidente fue derrotado por 40 votos a uno en dos propuestas: analizar la permanencia del grupo en la coalición de gobierno y fusionar al partido con otras dos agrupaciones políticas. Alencar fue el único en oponerse a discutir la salida del PL del gobierno y el único en votar a favor de la fusión del partido con otras agrupaciones minoritarias. Ambas decisiones deben ser discutidas en la convención nacional del PL en octubre próximo.

El vicepresidente, un magnate de la industria textil de Minas Gerais, fue invitado a ingresar en el año 2001 al PL, que ya buscaba una alianza con el entonces candidato Lula para los comicios generales del 2002. Lula, por su parte, escogió a Alencar como compañero de fórmula porque necesitaba el respaldo de los empresarios y sectores centristas para asegurarse una victoria electoral, así como disipar los fuertes temores existentes entonces sobre su gestión económica al frente del gobierno.

El presidente del PL, Valdemar Costa Neto, quien renunció a su banca de diputado el 1º de agosto para evitar el juicio político en el Congreso, admitió que recibió del PT 6,5 millones de reales (unos 2,8 millones de dólares) entre 2003 y 2004, para pagar, según él, deudas de campaña, dineros que no fueron declarados como disponen las leyes.

Los fondos recibidos por Costa Neto fueron parte de los 55 millones de reales (unos 23,9 millones de dólares), distribuidos por el PT a formaciones aliadas entre 2003 y 2004. El partido oficialista admite el financiamiento ilegal de las campañas, pero rechaza que tales dineros, distribuidos en efectivo, sirvieran para "comprar" la fidelidad de los legisladores aliados en el Congreso.


Zafó Delubio Soares
Delubio Soares, ex tesorero del PT, logró suspender ayer que la directiva del partido lo expulsara, al conseguir un medida judicial preventiva. La cautelar fue presentada por los abogados de Soares cuando comenzaba la reunión de la directiva nacional del PT. Los abogados de Soares alegaron que el proceso del PT para debatir la expulsión violó procedimientos internos del partido y que no tuvieron acceso a todos los documentos del proceso. Soares fue tesorero del PT durante los últimos cinco años, hasta que debió renunciar en junio, ante la avalancha de denuncias sobre corrupción.

La reunión de la directiva, sin embargo, pudo proseguir pero para tratar los otros tres puntos de la agenda: la situación de otros militantes vinculados a las denuncias, la crisis política y el venidero proceso electoral del PT, el 18 de septiembre.

Delubio Soares es considerado un incondicional del ex hombre fuerte del gobierno y del partido, José Dirceu. Este se halla entre los 18 diputados que casi con seguridad serán expulsados de la Cámara por su participación en el esquema de corrupción en el Congreso. Pero Dirceu no sólo se negó a renunciar a su banca y ahorrarle así a su partido un desgaste extra, sino que pretende seguir comandando en el PT, a cuyas internas del 18 de septiembre se postula como presidente. Según trascendidos de prensa, Lula se ha enojado con la actitud de Dirceu y piensa "sacrificarlo" para despegar al gobierno y al PT del escándalo. Pero Dirceu cuenta con muchos apoyos en la directiva petista.

Lula y su vice Alencar en tiempos mejores.