|
domingo,
21 de
agosto de
2005 |
Enojos: equilibrio emocional
Un estudio reciente descubrió que hay una conexión directa entre los estados de alteración anímica y los problemas de salud, el estrés o las adicciones. Los resultados de investigaciones realizadas por el University's Wellness Letter de la Universidad de Berkeley, indican que el mayor riesgo se presenta cuando se padece lo que algunos especialistas denominan como enojo o ira crónica que se manifiesta a través de repetidos y constantes malestares anímicos y alteraciones del carácter.
El enojo crónico debilita el sistema inmune posibilitando que el paciente caiga en adicciones como el tabaquismo o el alcoholismo. Otra de las manifestaciones más frecuentes es el estrés. Debido a las preocupaciones y las presiones laborales, a menudo se viven situaciones de gran tensión en las que se produce alteración de las hormonas con un consecuente debilitamiento del sistema inmune.
El estrés es una respuesta del organismo frente a una situación que altera el equilibrio emocional lo que repercute de diversas maneras según la personalidad.
El doctor John Swartzberg de la Universidad de California que dirige los estudios que investigan la relación entre el enojo y la salud, aseguró que "actualmente los científicos están seguros de que la ira crónica afecta la salud". La primera parte del informe devela que el mayor riesgo lo tienen los hombres con enfermedades cardiovasculares y las mujeres en el período post-menopáusico. En la segunda se llegó a la conclusión de que el 40 por ciento de las personas que mueren producto de ataques cardíacos experimentó una situación de tensión en un lapso de dos horas previas al deceso.
El doctor Miguel Angel Materazzi, director del Hospital Neuropsiquiátrico José Borda, explicó que "debe entenderse la salud como única e interdisciplinaria. En ese contexto, el cuerpo se utiliza como una canalización de los problemas. Según cual sea la debilidad de cada persona, las manifestaciones cambian".
El especialista sostiene que la salud es psicocéntrica, todo lo rige la psiquis y lo demás acompaña, y agregó que las manifestaciones del cuerpo reciben el nombre de enfermedades psicosomáticas. Sin embargo, es importante determinar la diferencia entre ira y enojo: la ira es una manifestación extrema de una descompensación psíquica, mientras que el enojo es la expresión de un estado de inconformismo o molestia por problemas cotidianos.
enviar nota por e-mail
|
|
|