Interna eclesial. Atribuyen la dimisión de Juan CArlos Macccarone a que tiene una relación homosexual. La Iglesia lo niega

Versiones cruzadas para explicar la sorpresiva renuncia de un obispo

El dignatario que recibió al presidente Kirchner el 25 de mayo se alejó por "una falta grave" o "razones de salud"

La sorpresiva renuncia del obispo de Santiago del Estero Juan Carlos Maccarone, aceptada anteayer por el Papa Benedicto XVI, avivó la interna de la Iglesia Católica argentina, justo en vísperas de la semana en que se reunirá la comisión permanente del Episcopado. Versiones extraoficiales atribuyeron la renuncia a que el obispo mantiene una relación homosexual, pero voceros de la Iglesia lo negaron y dijeron que su decisión respondió a su estado de salud.

Monseñor Maccarone, el prelado que apoyó la intervención a Santiago del Estero, impulsó la investigación de las violaciones a los derechos humanos y se enfrentó abiertamente con el poder feudal del juarismo, tenía sobrados enemigos en esa provincia, algunos de los cuales habrían ventilado ahora una vieja denuncia por una presunta relación homosexual, que fue investigada en su momento por la Justicia. Monseñor Maccarone había llegado en 1999 al obispado de Santiago del Estero en reemplazo del obispo Gerardo Sueldo, quien murió en un extraño accidente automovilístico en la ruta 9, a diez kilómetros al norte de la capital provincial, cuando volcó con su Renault 9 al regresar de Salta, en un caso que guarda algunas similitudes con el aparente homicidio de monseñor Enrique Angelelli, en La Rioja, en 1976, la reapertura de cuya causa fue pedida por el presidente Néstor Kirchner el 4 de agosto pasado, cuando denunció el asesinato.

"Con su defensa de los derechos humanos, monseñor Maccarone ha tocado algunos intereses creados", denunció ayer el sacerdote santiagueño Sergio Lamberti, con respecto a las posibilidades de que la imputación que habría determinado la renuncia del obispo haya sido impulsada por sus enemigos en Santiago del Estero, durante la conferencia de prensa ofrecida a última hora de la tarde en el obispado de esa ciudad.

"Expresamos nuestro agradecimiento a monseñor Maccarone por su labor de seis años en favor de los pobres y de quienes tienen la vida y la fe amenazadas", sostuvo ayer con elocuencia un grupo de cuatro sacerdotes santiagueños, integrado además de Sergio Lamberti por los curas Jorge Ramírez, Roberto Moral y Sergio Rafaelli. Los sacerdotes santiagueños dedicaron especialmente un párrafo a responder la acusación de una supuesta relación homosexual cuando advirtieron: "Proclamamos nuestra solidaridad con Maccarone. Y decimos que su debilidad es un signo de la debilidad de todos los hombres y mujeres, a quienes Jesús vino a salvar en la cruz".


Niegan relación homosexual
Asimismo, el obispado de Santiago del Estero negó ayer que monseñor Juan Carlos Maccarone haya renunciado a esa jurisdicción eclesiástica por mantener una supuesta relación homosexual y, en cambio, atribuyó esa decisión a "serios problemas de salud".

La secretaria de Prensa del Episcopado, Sonia Quiroz, sostuvo que el ex obispo "nunca admitió una relación homosexual", tal como indicaron algunas versiones periodísticas, con lo que rechazó que su alejamiento se haya producido por esa razón.

No obstante, reconoció que Maccarone, de 64 años, fue investigado por una sospecha en tal sentido, pero dijo que "eso es causa cerrada, porque no hubo pruebas materiales".

En tanto, fuentes eclesiásticas dijeron desconocer si Maccarone será internado en las próximas horas en una clínica porteña por sus problemas de salud. Por el contrario, comentaron que podría recluirse en una casa de retiro espiritual, en la provincia de Buenos Aires.

La vocera del obispado santiagueño señaló, por su parte, que el renunciante "está mal de salud" y debería internarse en una clínica de la Capital Federal, adonde llegó anteayer.

En declaraciones a Radio del Plata, Quiroz no precisó los problemas que padece el religioso, aunque comentó que "son muchas afecciones pulmonares, hipertensión y graves complicaciones respiratorias".

"Yo quisiera dejar en claro algo: el ministro nunca admitió una relación homosexual, no comunicó ni confesó que haya tenido una relación homosexual", reiteró Quiroz.


Misterio abierto
La vocera explicó que Maccarone adelantó el viaje a la Capital Federal "por razones de salud". En ese aspecto, mencionó que "está en Buenos Aires porque todos sus médicos son de Buenos Aires, es de conocimiento aquí en la diócesis que no gozaba de buena salud".

La renuncia fue dada a conocer anteayer, aunque en la comunicación oficial distribuida por la agencia católica Aica no se explicaron los motivos de su alejamiento.

En su lugar quedará temporáneamente monseñor Luis Villalba, arzobispo de Tucumán, hasta que se designe un reemplazante.

Maccarone no había alcanzado aún el límite de los 75 años que establece el Código de Derecho Canónico para el cargo de obispo.

Para su dimisión alegó el inciso 2, del canon 401, que refiere a enfermedad u otra "causa grave". Al respecto, la norma canónica especifica: "Se ruega encarecidamente al obispo diocesano que presente la renuncia de su oficio si por enfermedad u otra causa grave quedase disminuida su capacidad para desempeñarlo". Por ahora, las razones de la renuncia de Maccarone permanecen en el misterio.

Juan Carlos Maccarone, uno de los obispos más progresistas de la Conferencia Episcopal.