Aapresid. Cerró en Rosario el XII congreso de la entidad que promueve la siembra directa. Asistieron 2.000 personas

Empresarios del campo apuestan a la ciencia para el desarrollo económico

Los dirigentes del sector subrayaron la necesidad de apostar a una "economía del conocimiento"

Patricia Martino / La Capital

Los empresarios del sector agropecuario nucleados en la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) propusieron una agenda de desarrollo basada en "la economía del conocimiento", con fuerte acento en la vinculación entre los sectores productivos y el ámbito científico, con participación del Estado.

Estas fueron algunas de las conclusiones presentadas en el cierre del congreso de la entidad, que reunió a unas 2 mil personas durante cuatro días en la Bolsa de Comercio de Rosario. El último panel, del que participaron filósofos, dirigentes políticos y el ministro de Educación, Daniel Filmus, se subrayó la necesidad de impulsar un modelo propio de innovación productiva.

Víctor Trucco, presidente honorario de Aapresid, ubicó este programa en el concepto de "un modelo criollo de economía del conocimiento", que a través de la educación y el cambio de paradigmas impulse el desarrollo económico.

"Debemos darnos cuenta que tenemos una oportunidad para el cambio, para convertirnos en lo que realmente queremos ser", dijo y, tras recordar las innovaciones productivas que se produjeron en el sector agropecuario en los últimos años, advirtió: "El progreso se logra con innovación, se pudo mejorar la productividad del país con conocimiento y trabajo y Aapresid ayudó a este cambio". Explicó que "aunque hoy usemos los fertilizantes de Estados Unidos o su biotecnología, nuestra agricultura es mejor y ellos mismos lo reconocen".

En ese sentido, destacó que "debemos aprovechar que hoy en día vuelven nuestros hijos al país cargados de conocimiento, de ciencia, con doctorados" y sugirió potenciar este marco para desarrollar la sociedad del conocimiento y la información.

"La clave para el desarrollo se tiene que hacer en el marco de la dignidad del hombre y con el rechazo a la marginalidad de la condición humana, también es importante el acceso a los sectores ricos en información, la colonización y diversificación de los espacios rurales, la conservación del patrimonio cultural y la utilización de la información genética y de la biodiversidad", puntualizó y advirtió: "De qué nos sirve el conocimiento si cada vez que queremos tocar un gen se arma un escándalo".

Trucco llamó a derrumbar algunos mitos y resaltó el papel de la soja en la recuperación económica luego de la crisis de 2001. También cuestionó el concepto de primarización de la economía, al mencionar casos de países que basan su economía en la agroindustria y muestran importantes índices de desarrollo económico.

Además de Trucco, la mesa de cierre del congreso estuvo integrada por Alejandro Rozichtner, Juan José Sebrelli y Carlos Alvarez, y contó con la coordinación de Gustavo Grobocopatel.

Sebrelli dijo que el cambio de paradigmas se da en la Argentina y en el mundo, y Rozichtner vaticinó que "estamos frente a un cambio cultural sin precedentes".

En tanto, Alvarez propuso que los países, y la Argentina en particular, encuentren "una carta de navegación" para el crecimiento, sin prejuicios. Mencionó el caso de Chile, "un país que hace un acuerdo comercial con Estados Unidos pero que después vota en contra de ir a la guerra con Irak en las Naciones Unidas".

Al cierre del panel, el titular de Los Grobo, Gustavo Grobocopatel, resumió la agenda del modelo criollo y aseguró que "hay que buscar el equilibrio entre las soluciones a los problemas de corto plazo y la mirada a largo plazo". Consideró que en esta agenda de desarrollo "el rol del Estado no debe ser ni superpresente ni ausente, debe ser un Estado facilitador al servicio de la gente que permita igualdad de oportunidades".

Más allá de otros temas que se tocaron, todos cayeron en la educación. "El gran desafío no sólo es la educación primaria, secundaria o universitaria, sino la educación permanente, algo que tiene que ver con el cambio de paradigmas", remató Grobocopatel y le dio paso al ministro de Educación de la Nación, Daniel Filmus.

El titular de la cartera educativa propuso discutir el papel de la educación en el nuevo paradigma y compartió algunas cifras con los asistentes. En el ranking mundial de países con mejor educación figuran entre los diez primeros Finlandia, Irlanda, Canadá e Indonesia. "Países agricultores que en los 60 estaban peor que la Argentina", dijo.

El presidente de Aapresid, Jorge Romagnoli, habló en el cierre del congreso y reivindicó la idea de que el sector agropecuario está mirando más allá de su propio sector, "perforando la tranquera que nos limita". En ese marco, agradeció a todos los socios de Aapresid por acompañar con su compromiso y su entusiasmo, por seguir creciendo. Además, durante el acto de clausura se nombró como socio honorario al biólogo argentino radicado en Estados Unidos Otto Solbrig y se distinguió a los investigadores y técnicos que trabajan con la organización: Rodolfo Gil, Santiago Barberis, Daniel Canoba, Leandro Pierella y Jorge Stafolani recibieron diplomas por su tarea en Aapresid. También se distinguió a la Regional Los Surgentes-Inriville, que trabaja desde hace años en conjunto con la institución. Santiago Lorenzatti, el coordinador general de Aapresid, reconoció la "labor desinteresada" de los especialistas y los felicitó por el valor que generan en la institución.

Rozichtner, Sebrelli, Alvarez, Trucco, Filmus y Grobocopatel, en el panel de cierre.