Los dueños reclamaban el permiso hacía siete meses

Habilitarán dos locales en el parque España

Tras siete meses de reclamos, los dueños del bar Quillagua (ex Aux Deux Magots) y de la pizzería Focaccia obtuvieron el compromiso de la Municipalidad de otorgarles la habilitación para trabajar hasta tanto se resuelva el conflicto judicial que el Palacio de los Leones mantiene con la empresa Coyde SA, concesionaria de los terrenos en la costa central. Los comercios, que están ubicados a la altura de Entre Ríos, habían obtenido todos los permisos para edificar y remodelar los locales; sin embargo, la Dirección General de Concesiones no les otorgaba la habilitación para abrir. Ahora, tras una reunión con los empresarios realizada el viernes, la titular del área, Hilda Gontín, aseguró que "se les dará un permiso provisorio hasta tanto se resuelva el conflicto penal con la otra firma".

Las trabas para abrir los locales comerciales comenzaron junto con el pleito que mantiene la Municipalidad con la empresa Coyde SA, concesionaria de los terrenos liberados por entes nacionales ya desaparecidos. La firma tenía siete hectáreas, de las cuales seis fueron entregadas nuevamente para el uso público luego de una ardua negociación. Si bien se quedó sólo con una hectárea, desde la Dirección de Concesiones aseguran que "nunca presentó el proyecto integral para la zona como lo establece el contrato".

Ese fue el puntapié inicial de un largo pleito en la Justicia provincial, que terminó trabando a su vez la apertura del bar y la pizzería.

Ahora, la directora de Concesiones aseguró que "hay un compromiso de entregarles la habilitación apenas presenten la solicitud por escrito" y explicó que "se les otorgará un permiso para que puedan trabajar hasta tanto se resuelva la cuestión judicial".

La funcionaria recalcó que "de todas formas tanto la pizzería como el bar deberán cumplir con todos los requisitos de cualquier concesionario" y agregó que "una vez terminado el tema en los Tribunales, obtendrán una habilitación por cinco años como todos los locales de la ciudad".

Tanto los titulares del bar Quillagua como de la pizzería Focaccia habían reclamado en reiteradas oportunidades la habilitación municipal, una demora que les estaba causando "el incremento del lucro cesante todos los meses".

"Acá la pelea es entre la Municipalidad y Coyde, el concesionario del terreno, pero nosotros estamos en el medio. El municipio dice que Coyde no entregó el proyecto general para todo el predio, la empresa dice que lo hizo, y esa pelea nos perjudica", explicó a La Capital Tomás Bertotto, dueño de Quillagua.

El bar Quillagua trabajará donde estaba el antiguo Aux Deux Magots al final de Entre Ríos.