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 miércoles, 13 de julio de 2005  
Avances en tratamiento oncológico
Ventajas de la radioterapia tridimensional

En materia de tratamientos oncológicos, la radioterapia de intensidad modulada (IMRT por sus siglas en inglés) avanza en una dirección clave al pasar de la bidimensión a la tridimensión. Esta modalidad posibilita trabajar con volúmenes en vez de superficies, afectando en menor grado las áreas que no se desean irradiar y preservando las células sanas.

Sobre este nuevo paradigma en la oncología radiante disertó en Rosario Bahman Emami, profesor y jefe del servicio de Oncología Radiante de Loyola University, de Chicago, invitado por el Centro de Radioterapia que dirige Juan Reñé. "Con la IMRT se definen previamente con la computadora los volúmenes a irradiar y las áreas a preservar, lo que otorga enormes beneficios al paciente en cuanto a consecuencias no deseadas", explicó a La Capital el especialista .

Otra de las diferencias de la IMRT con la radiación bidimensional es que cada haz de radiación está dividido en pequeños haces en los que se puede regular la intensidad. "Esto nos habilita a tratar específicamente los volúmenes a tratar", agregó.

La técnica, muy usada en los Estados Unidos, no reduce la cantidad de aplicaciones habituales a cada tipo de cáncer pero sí minimiza las complicaciones del tratamiento con rayos. "La boca seca, algunos problemas de deglución y modificaciones en el paladar y el gusto, o alteraciones dentarias, son muy comunes. Ahora, el 80% de los pacientes no conoce estas consecuencias", relata Emami.

La radioterapia de intensidad modulada se utiliza en cáncer de próstata, de cabeza y cuello y mamas. "En próstata se determinó que el aumento de las dosis de rayos permitía un nivel de cura cercano al 90%. Para llegar a dosis tan altas sólo podemos usar IMRT", comenta el especialista.

"En el cáncer de cabeza y cuello las complicaciones era altas, pero ahora, con la tridimensión podemos acceder a lugares y a intensidades que mejoran el tratamiento. En mamas definitivamente ofrece mejoras, sobre todo en tumores del lado izquierdo, donde preservamos el corazón y el pulmón de las radiaciones", aseguró Emami.

Entre las ventajas mencionó que el tratamiento con radioterapia tridimensional es sumamente efectivo en chicos ya que reduce las complicaciones a corto y largo plazo.

Respecto a las debilidades del sistema, mencionó que como aún no es posible determinar con exactitud dónde se encuentran las células cancerosas "tenemos un camino pendiente en ese sentido", pero se manifestó optimista sobre el futuro, al que denominó de "muy alentador". La práctica y los avances de la investigación "nos darán más precisión para trabajar", dijo.

Respecto de las nuevas técnicas diagnósticas dijo que aportan y aportarán grandes avances al tratamiento con rayos. "Gracias a las nuevas técnicas de diagnóstico por imágenes podremos enfocarnos en el núcleo del tumor. La radioterapia tendrá importantes avances de la mano de la medicina nuclear", alentó el especialista.

"Las dos grandes áreas de tratamiento oncológico, rayos y quimioterapia, van de la mano", señaló Emami, y destacó que la gran revolución "está dada por el uso de las dos en forma coordinada". En este sentido explicó que algunas drogas que combaten el cáncer "debilitan a las células malignas y hacen que la radioterapia sea 10% más efectiva".
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