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 miércoles, 01 de junio de 2005  
Latinaguas ya pone sus condiciones para prestar el servicio en Santa Fe
El gobierno asegura que la empresa tiene buenos antecedentes. El Ejecutivo estudia abrir la negociación

La compañía Latinaguas, que está en conversaciones con el gobierno provincial para hacerse cargo de la prestación del servicio de agua y cloacas en las 10 localidades donde opera Aguas Provinciales (APSF), reconoce que es "muy difícil" tomar una prestación si no se modifican algunas de las tres variables que terminaron con la rescisión del contrato: tarifas congeladas, pasivos de la empresa y obras inconclusas.

"El escenario en Santa Fe -que llevó a la rescisión del contrato- está marcado por tres variables que son tarifas sin aumentos, un pasivo empresario y plan de obras incompleto, antecedentes que hacen difícil que alguien se haga cargo si no se busca alguna alternativa", dijo el gerente comercial de Aguas de Corrientes, del grupo Latinaguas, Pablo Langus.

Ante esto "habrá que ver cuál de estas tres variables quiere el Ejecutivo que quede fija y sobre cuál trabajar", explicó el directivo, lo que deja en claro que en el marco de las negociaciones, algún cambio de escenario debe haber.

Por estas horas, el gobierno de Santa Fe comenzó a analizar el pedido de Latinaguas de abrir una puerta de negociación para hacerse cargo de la prestación del servicio y como primera medida arrancó estudiando los antecedentes de la compañía en otras provincias.

El ministro de Obras Públicas, Alberto Hammerly, consultó a su par de Corrientes, Arturo Colombi, quien calificó como "muy positiva" la gestión de Aguas de Corrientes (Latinaguas) en diez localidades de esa provincia.

Colombi dijo que la empresa cumplió las metas que se habían fijado originalmente en la concesión y que ahora se estaba analizando la posibilidad de extender la prestación a algunas áreas periféricas que no estaban contempladas en el contrato original.

El titular del Ente Regulador del Servicio Sanitario (Enress), José Kerz, también se ocupó del tema y consultó a sus pares de Salta y Corrientes, quienes le informaron que el prestador "tiene buen prestigio, buena fama", dijo a La Capital.

La averiguación de los antecedentes patrimoniales y las condiciones como prestador del servicio de Latinaguas será un paso posterior, "si el Ejecutivo abre el ámbito de negociación con la firma", aclaró Kerz.

En rigor, el contrato prevé la transferencia de acciones y cambio de operador, siempre con previa autorización del Ejecutivo provincial. Esto ya ocurrió en Santa Fe cuando Comercial del Plata traspasó sus acciones a otros integrantes del grupo. De todos modos, en este caso se trata del traspaso a un nuevo grupo que no participa del paquete accionario de Aguas Provinciales de Santa Fe.

La nota que envió Latinaguas al gobernador Jorge Obeid señala que es un grupo nacional que quiere hacerse cargo del servicio, y que estaría en condiciones de comprar las acciones de los tres socios extranjeros. También detalla los antecedentes y plantea un ámbito de "interlocución" donde plantearán más claramente las condiciones que solicitan para operar en Santa Fe.


Qué se negocia
A priori, Kerz adelantó que "el contrato está vigente y sujeto a renegociación en los términos que plantea la ley de emergencia económica" como: competitividad, aumento de tarifas, seguridad del servicio y las instalaciones, rentabilidad empresaria y universalidad de la prestación.

Si bien las negociaciones se están haciendo desde la presidencia del grupo Latinaguas, Langus deslizó algunos esquemas bajo los cuales se podría llegar a un acuerdo con el gobierno de Santa Fe. Entre ellas, un gerenciamiento por parte de la compañía, que ya tiene experiencia por haberlo hecho dos años en La Rioja, donde luego se quedó con la concesión del servicio.

Aunque el ejecutivo señaló que "las conversaciones están en pañales", se animó a barajar algunas hipótesis sobre algunas fórmulas de gerenciamiento. Incluso no descartó que el Estado se encargue de las obras de infraestructura y la compañía de realizar la administración y la prestación del servicio.

Además del Enress, la fiscal de Estado, Igmar Lepennies, también se ocupó de buscar antecedentes de la empresa interesada en Corrientes, Salta y La Rioja y "obtuvo buenas referencias", señaló ayer Hammerly.

Para la Asociación de Usuarios y Consumidores de Corrientes, los antecedentes de la compañía Latinaguas dejan mucho que desear. La movida reprivatizadora también encendió la alarma del intendente Miguel Lifschitz, la oposición política y las organizaciones sociales que batallaron desde un principio contra la privatización del servicio de agua (ver aparte).

La alternativa Latinaguas es motivo de debate incluso dentro mismo del gobierno provincial, donde hay sectores que temen encontrarse frente a una empresa que, como mínimo, promete tanta polémica como el contrato con Suez. Desde ese punto de vista, la última alquimia del capítulo Aguas suena tan estrambótica que terminará por alimentar el consenso de quienes batallan por la vuelta del servicio a la esfera estatal.
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El gobierno provincial ahora negocia con otro operador privado.

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