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jueves,
12 de
mayo de
2005 |
Por la seguridad
vial de un barrio
Hace ya cuatro años que se inició una gestión solicitando la colocación de dos lomos de burro en Pascual Rosas al 400. El objetivo era evitar posibles accidentes provocados por la entrada y salida a alta velocidad de toda clase de vehículos al estacionamiento de una entidad deportiva que cierra la calle en su extremo norte. El pedido fue aprobado pero se hizo imposible de ejecutar porque no se pagó el canon correspondiente a la empresa concesionada que debía realizar dicha tarea. Cuando el señor intendente programó visitas al barrio y se interiorizó del problema la esperanza de los vecinos renació. Transcurrió ya un tiempo y la ilusión volvió a desvanecerse. Todo sigue igual. Le pedimos al señor intendente que tenga en cuenta este pedido justificado que debería ser tenido en cuenta con rapidez. Somos integrantes de la sociedad rosarina que paga sus impuestos y esperamos que la municipalidad cumpla con las funciones para las que fue delegada.
José Delogu
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