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 sábado, 07 de mayo de 2005  
Una brutal pedrada contra un auto hirió a una mujer en la cabeza
Fue en Pellegrini y Beruti, a la altura del puente. Los autores no fueron identificados

Una mujer de 29 años sufrió un fuerte traumatismo de cráneo cuando el automóvil en el que se desplazaba por avenida Pellegrini junto con su esposo fue apedreado por un grupo de desconocidos. El ataque se produjo a la altura del puente peatonal que conecta el parque Urquiza con calle Beruti y los autores no fueron identificados. La víctima estaba fuera de peligro, pero internada en un sanatorio.

María Broin trabaja como mucama en el centro médico de Laprida al 1000. Al concluir su turno, el jueves a la noche, hizo lo de siempre: esperó a su marido, Alejandro Leiva, quien la pasaría a buscar en su Ford Escort. Y así ocurrió. "Desde que la asaltaron hace como un año no la dejo volver más sola. Fue muy violento lo de aquella vez. Un tipo la esperó a que bajara del colectivo y de un golpe le arrancó la cartera. Entonces como ella se quedó muy asustada decidí pasar a buscarla siempre", rememoró el muchacho en uno de los pasillos de la clínica donde descansaba María.

Todo sucedió alrededor de las 21.30. Leiva sentado frente al volante y Broin ubicada en el asiento del acompañante salieron por Laprida, giraron a la izquierda por Pellegrini y encararon hacia la zona del puerto en busca del acceso sur que los condujera a Villa Gobernador Gálvez, donde viven con una nena de dos meses.

Pero el viaje, que para la pareja era algo de rutina, se transformó en un gran susto. "Paramos frente al semáforo de Pellegrini y Necochea. Además de nosotros, había tres o cuatro autos más. Cuando la luz se puso en verde arrancamos todos hacia la avenida Belgrano", contó a La Capital. Leiva y su mujer no alcanzaron a ver nada que los alertara de un ataque.

"Antes de llegar (a Belgrano) recibimos dos piedrazos, justo cuando pasábamos debajo del puente. Uno dio en la ventanilla del lado derecho, donde estaba sentada mi mujer. La piedra atravesó el vidrio y le dio de lleno en la cabeza. El otro pegó en la puerta de atrás y también destrozó el cristal", señaló. "No puedo asegurar que nos tiraran desde el puente, tal vez haya sido desde la barranca. Lo cierto que los piedrazos dieron del lado derecho".

Con su mujer herida, la primera reacción de Alejandro fue proseguir la marcha hasta Belgrano para luego doblar hacia la izquierda. "Cuando vi que estaba bien, aunque muy dolorida, seguí de largo. Ni me fijé si había gente arriba de la barranca o del puente. Sí vi que pasaron algunos autos, que alcanzaron a ver lo que ocurrió pero que siguieron de largo", dijo. Alejandro manejó por la avenida hasta empalmar con la subida de calle San Juan para regresar al Sanatorio Laprida, donde trabaja María.

Allí la mujer fue atendida por un traumatismo de cráneo y por los cortes en la cara y manos sufridos al estallar el cristal. "Por la forma y la distancia desde la que tiraron no creo que hayan sido pibes. Para mí fueron adultos, aunque te aclaro que no pude ver nada más que el cristal estallando", opinó Alejandro, quien es remisero en Villa Gobernador Gálvez. Los médicos que atendieron a María dijeron que tenía una herida superficial, pero debía guardar reposo por el golpe en la cabeza. "Ella está asustada y dolorida, pero además preocupada. Tenemos una beba (Edith) de dos meses a la que hoy no podrá darle la teta".
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Alejandro llevó a su esposa al sanatorio Laprida.


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