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miércoles,
20 de
abril de
2005 |
Italia: Belusconi renunció y formará una nueva coalición política
Roma.- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, acorralado por la peor crisis en los cuatro años de su actual gestión, anunció hoy en el Senado que renuncia para formar un nuevo gobierno que atienda los reclamos de los partidos que abandonaron su coalición o que amenazaron hacerlo.
"Esta vez no habrá sorpresas, dimito y voy a ver al jefe del Estado", el presidente Carlo Azeglio Ciampi, dijo Berlusconi, minutos antes de subir a la tribuna del Senado para hacer oficial el anuncio.
Todos los senadores se pusieron de pie y aplaudieron la decisión de Berlusconi, y de las bancas de la oposición de centroizquierda se alzó un único grito: "Era hora".
Berlusconi, de 68 años y jefe del gobierno italiano de mayor duración desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, dijo que tenía previsto ir a ver a Ciampi para presentarle su dimisión y recibir el encargo de formar un nuevo Ejecutivo, algo que permitirá evitar un adelantamiento de las elecciones previstas para mayo de 2006.
El premier justificó su renuncia en el descalabro electoral sufrido por su coalición de la Casa de las Libertades en las últimas elecciones regionales, en las que la alianza perdió seis de las ocho regiones que controlaba antes de los comicios.
"Hace poco más de dos semanas, en las elecciones regionales, el país envió una señal de malestar que en su magnitud tuvo un claro significado", dijo Berlusconi.
"He entendido esa señal y pretendo dar una respuesta. Es cierto que el Ejecutivo entró en crisis, pero son los electores los que deben decidir y nadie ha percibido un cambio en la mayoría" que gobierna Italia", prosiguió.
"Para relanzar nuestros esfuerzos, planeo actualizar nuestro programa, incrementar nuestra fuerza para proteger el poder adquisitivo de las familias, apoyar a nuestras empresas y asegurar un desarrrollo renovado y auténtico del sur del país", agregó.
Los problemas para Berlusconi, a un año de las próximas elecciones generales de 2006, comenzaron la semana pasada cuando la Unión Demócrata Cristiana (UDC) y el partido de los Nuevos Socialistas retiraron sus ministros del gobierno, descontentos con la derrota en las regionales y las políticas oficiales. (Télam)
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