Aruba: La isla bonita

El turismo argentino que llegó a estas playas del Caribe se incrementó un 13 por ciento el último año. Cuáles son los mejores lugares para visitar

En sólo 185 kilómetros cuadrados se extiende un paraíso de arenas blancas rodeado por el traslúcido mar Caribe que invita al placer. Aruba, al norte del Ecuador, junto a las Antillas Holandesas, es un destino buscado por turistas de todas partes del mundo y cada vez más por los argentinos que incrementaron su presencia en un 13% en el último año, tal vez motivados por el entusiasmo que demuestra cada vez que pisa la isla su compatriota Máxima Sorrequieta, princesa de Holanda.

Avistada por primera vez en 1499, siete años después de la llegada de Cristóbal Colón a América, los españoles la calificaron en sus mapas como la "tierra útil".

Aruba fue ocupada por los holandeses desde 1636 hasta 1805 y luego por los ingleses hasta 1816. Durante 1824 se descubrieron los primeros yacimientos de oro y más tarde importantes reservas de petróleo. Pero fue recién en el siglo pasado cuando Aruba, ya en poder del Reino Unido de Holanda, despertó como destino turístico de primer nivel, elegido por el turismo internacional.

La isla es buscada especialmente por los amantes del buceo ya que cuenta con 20 sitios para la práctica de este deporte. Peces tropicales, corales deslumbrantes, esponjas tubulares, calamares, estrellas de mar y tortugas forman parte de un paisaje acuático sorprendente.

Las playas son verdaderas perlas en este rincón del Caribe. Todas las extensiones de arena en Aruba son públicas y de entrada gratuita. Se puede ingresar desde cualquiera de los hoteles que tienen salida al mar y recorrerlas. Se destacan Baby Beach, Rodger´s Beach y Palm Beach. La costa sur de la isla está repleta de playas anchas que se caracterizan por su limpieza.

En Palm Beach se encuentran los principales hoteles de las cadenas más prestigiosas del mundo que ofrecen servicios internacionales de primer nivel y la mayoría cuenta con el sistema "all inclusive". Pero para aquellos que anhelan un viaje más íntimo y romántico pueden pasar su estadía en pequeños y cálidos hotelitos, casas de huéspedes o sencillas posadas.

Uno de los entretenimientos imperdibles es el de las fiestas a bordo de románticos veleros que ofrecen una cena y baile ideales para disfrutar en una estrellada noche con el aroma del Caribe y una brisa suave y fresca que siempre sopla cuando sale la luna.


Cuidado con los desnudos
En Aruba no están muy bien vistos los desnudos o el topless, sin embargo, en playas pequeñas y muy apartadas, sobre todo en la costa noreste, se estila andar sin ropas. Son playas a las que se llega casi exclusivamente en 4 x 4 o a caballo.

En los complejos turísticos no se permite andar a las mujeres sin corpiño. Sí está habilitada esta modalidad en la mayoría de las playas céntricas aunque no gocen de la aceptación de los arubanos.


Más barcos y cruceristas
Aruba incrementó el número de turistas que llegaron en cruceros en los últimos años. En 2004 hubo un incremento del 5% comparado con el año anterior. El número de cruceros que llegaron al puerto aumentó de 315 en 2003 a 318 en 2004, según fuentes oficiales.

Diciembre pasado fue un mes al tope de las expectativas con la llegada de 51 cruceros, lo cual implicó un total de 77.597 pasajeros. En igual mes de 2003, se reportó la llegada de 39 barcos con 72.278 pasajeros.

Las playas se caracterizan por su limpieza.