Una masacre esperable. Especialistas enfocan la tragedia y su origen

Los rosarinos apuñalados son una constante en los últimos años de Coronda

Durante 2004, fueron ocho los presos de esta ciudad que murieron acuchillados en peleas con otros internos

Decía el lingüista Tzvetan Todorov que una sola muerte es una tristeza y un millón de muertes es una información. La dimensión de la tragedia de ayer, que se llevó 13 vidas de una correntada, no debería eclipsar la importancia de la secuencia de crímenes que, no de una vez sino en cuentagotas, se registran año a año en Coronda. Durante 2004 murieron ocho internos en esa cárcel. En 2003 fueron 11. En 2002 habían sido 12. Y entre 1999 y 2002 hubo 38 en toda la provincia, según la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC).

Hace menos de un mes, el 20 de marzo, La Capital publicó la primera nota de un informe sobre la violencia en Coronda. "Acá te acuchillan por cualquier cosa", era el título. Un interno confiaba ayer a un cronista de este diario que visitó el penal. "Puede que no haya muertos, pero siempre hay un apuñalado".

Las peleas a puntazos entre presos han sido moneda corriente en la historia de la cárcel de Coronda. El Estado tiene deberes de custodia y cuidado con los reclusos pero esto se toma como algo rutinario. De las víctimas fatales de 200 4, cuatro murieron apuñaladas en Coronda en los primeros diez meses de 2004, tres en noviembre -el mes más trágico- y otro en diciembre.

El 21 de marzo de 2004: Cristián Raúl Sueldo, de 30 años, fue asesinado por otros presos en el pabellón 12.

El 9 de abril de 2004 murió otro preso rosarino apuñalado: Esteban Yedro, de 26 años, tras una pelea en el pabellón 6. El 14 de julio de 2004 murió apuñalado un nuevo interno rosarino en Coronda: Gustavo Ariel Saravia, de 21 años, falleció en el pabellón 3, en una pelea entre unos 20 internos.


Noviembre trágico
El 8 de noviembre del año pasado el preso rosarino Oscar Giménez, de 34 años, fue asesinado a puñaladas por el interno santafesino Pedro Adolfo Pérez, de 20 años, en una pelea producida a las 6 de la mañana en el pabellón 9. "Lo maté porque si no me mataba él", declaró el agresor.

El 9 de noviembre de 2004 murió otro preso rosarino acuchillado: Carlos Norberto Cartelli, de 32 años, tras una pelea en el pabellón 12. Era un interno que había hecho continuas denuncias contra la guardia por actos de violencia. En la gresca fue herido otro interno rosarino: Daniel Eugenio Pereyra, de 23 años.

El 17 del mismo mes otros seis presos rosarinos fueron heridos en el pabellón 9 de Coronda, en una pelea. El 30 otro interno rosarino murió acuchillado, en el pabellón 6, llamado de los hermanitos porque la mayoría de sus integrantes son evangélicos: Jorge Martínez, de 27 años, se convirtió en el séptimo preso muerto en el año pasado, contra las 12 que hubo en 2003.

Y el 23 de diciembre de 2004 murió el octavo preso rosarino acuchillado en Coronda durante el año pasado: Fernando Espíndola, de 22 años, caído en el pabellón 12 durante una pelea.