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miércoles,
13 de
abril de
2005 |
Trayectoria. El músico habló de su carrera, su nuevo álbum con otros rockeros y la tragedia de Cromañón
Miguel Cantilo: "Algunos buscan fama por cómodos,
pero yo le huyo para trabajar mejor"
Para el cantante, el rock y el jazz moderno son los únicos géneros musicales abiertos a todas las influencias
U. G. Mauro / La Capital
"Creo que llevar el rock a una situación casi futbolística, de desborde, de rebaño humano en su máxima animalidad, hace mucho daño, porque parece que la música tuviera algo de responsabilidad y no es en absoluto así", consideró en diálogo con La Capital, y en referencia a los megarrecitales y a la tragedia de Cromañón, el cantautor Miguel Cantilo, previo a su reciente actuación del fin semana en el bar Olimpo, donde interpretó, acompañado por el percusionista Carlos Casalla, los temas de su disco "Sudamérica va".
El ex integrante, junto a Jorge Durietz, del recordado dúo Pedro y Pablo y creador de temas emblemáticos del rock argentino como "Marcha de la bronca" y "Yo vivo en una ciudad" anunció que en poco tiempo más comenzará a grabar una nueva placa, esta vez integrada por temas clásicos de su viejo repertorio pero con una característica diferente: "Voy a cantar en dúo junto a Charly García, León Gieco, Fabiana Cantilo, Andrés Calamaro, Gustavo Cordera y Rubén Rada, y además van a participar algunos instrumentistas muy importantes", anticipó.
Según el guitarrista y compositor, el disco "Sudamérica" no tiene, como puede presuponerse, una "onda andina". "Es un trabajo que no resiste ser pasado de una sola vez sino que requiere una escucha más cuidadosa porque tiene 14 canciones que recorren climas diversos; desde lo rioplatense en letra y música con tango, milonga, murga y candombe, hasta otras escapadas pero por el lado del este del continente, abrevando en el samba y la bossa nova, y que cuando incursiona en lo tropical llega hasta Panamá con cosas de la onda de Rubén Blades".
Miguel Cantilo calificó como "innumerables" a las influencias recibidas para un disco como "Sudamérica". "Empiezan con Daniel Viglietti y Atahualpa Yupanqui por el lado de lo folclórico, pero también están Astor Piazzolla y gente como Gilberto Gil, Rubén Blades y Silvio Rodríguez, pero eso no invalida las otras influencias que traigo desde siempre por el lado del rock".
Respecto de los dúos que integrará para grabar sus clásicos próximamente, el músico consideró: "No se trata únicamente de primeras figuras sino que me acompañarán también destacados instrumentistas como Kubero Díaz y Rubén "Mono" Izarrualde, entre otros. Muchos de los invitados más conocidos hicieron sus primeras presentaciones en público en recitales míos".
Cantilo, altamente calificado por sus colegas del rock nacional, optó siempre por un perfil bajo, tema sobre el que reflexionó señalando: "Algunos buscan fama por cómodos y yo le rehuyo por conveniencia, para trabajar mejor".
"El rock es quizás de la única música que está totalmente abierta, aunque quizás también le pasa al jazz tal como se lo entiende hoy. Si yo hubiese nacido 20 ó 30 años antes, posiblemente me hubiera dedicado al jazz. Esas son libertades que, por ejemplo, el tango no te da", dijo.
Al margen de éxitos discográficos, Cantilo rescata de su producción los trabajos que cuenten con mucha elaboración guitarrística. "Hay temas que fueron quedando como lo que trabajé con Kubero Díaz en los años 70 que creo que son cosas valiosas, hechas en una coautoría muy fuerte que creo que a veces no lograba ni con Jorge Durietz", señaló.
El músico definió luego su posición en torno a la tragedia del boliche Cromañón. "Creo que hay gente que no toca rock, pero igualmente hace de él una vergüenza. Lo que me da vergüenza del rock es, por ejemplo lo que pasó con Cromañón".
"Lo que menos hace esa gente -continuó- es ir a escuchar música porque los megaconciertos se han transformado en lugares de encuentro, sitios de pertenencia a los que se suman rituales futboleros que no tienen nada que ver", y agregó: "Parafraseando lo dicho por Manolo Juárez para el folclore, a veces el rock no tiene la culpa de quién lo toca, sino que se ve involucrado en situaciones que no se ven en el mundo".
"Rock se hace en todas partes, pero en muy pocas muere la cantidad que muere aquí. Me parece que nos falta la visión necesaria de la gente que tiene la manija de la cosa, desde el que organiza hasta el que está arriba del escenario, y del que cuida en la puerta. Todos los que tienen alguna responsabilidad no lo asumen", añadió Cantilo.
Sobre la posible culpa de los jóvenes, Cantilo consideró que los desbordes responden "a que alguien no supo poner los límites. Hay una responsabilidad del que prendió la bengala, pero alguien se la dejó entrar".
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Fotos
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Cantilo llegó a Rosario con disco nuevo, "Sudamérica".
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