De capa caída

Primera B: Córdoba cayó ante un sólido All Boys

Central Córdoba volvió a perder. ¿Fue justo? Sí. ¿Tuvo chances de empatar o hasta de aspirar a algo más? La respuesta también es afirmativa. Pero la enjundia que puso para suplantar la falta de ideas no alcanzó. Seguramente hizo las cosas mejor que en otros partidos, pero se encontró con un equipo que juega y piensa. Casi nada. Y allí estuvo la diferencia. Por eso el resultado (2-0) termina siendo justo. Lo del árbitro Savino fue pobre, pero no determinante.

A nadie escapa que a este partido Córdoba llegaba con la cabeza en otra cosa debido a su magro presente y a la renuncia de Cristian Domizi 48 horas antes del mismo. Así y todo le puso garra y corazón. Claro, generalmente con eso no alcanza. Y All Boys se lo hizo saber. Porque a la buena performance futbolística, el albo de Floresta le agregó serenidad y sapiencia. Precisamente lo que le faltó al equipo del interino Hernán Novacio.

La actitud del conjunto charrúa fue digna de destacar. A tal punto que sólo con eso le alcanzó para generarle un par de chances clarísimas a All Boys, la mayoría de ellas bien resueltas por el arquero Hugo Giménez. Es que casi todas fueron producto de pelotazos cruzados que, quedó claro, le dolieron y mucho a la última línea del albo. Así, primero Avila y después Cantero desperdiciaron sendos mano a mano, los que hubiesen servido para poner las cosas 1 a 1, ya que antes de eso Solchaga, a los 30' del primer tiempo, había tenido tiempo de recuperarse luego de ensayar una chilena para abrir el marcador.

El ingreso de Avila por Gerlo le dio más profundidad al equipo charrúa, pero nada cambió. Es que del otro lado, salvo algunas desatenciones en defensa, se veía un equipo ordenado, con un par de intérpretes (Vega y Francés) que estuvieron un escalón por encima del resto.

Encima las expulsiones de Zamuner (le pegó un codazo a Artaza) y de Farré (mal expulsado) complicaron aún más el panorama de un Córdoba que, con dos menos, no le quedó otra que ir por la heroica. Y así le fue. Porque All Boys aprovechó muy bien los espacios y con mucha tranquilidad hizo correr los minutos con la pelota al pie, hasta que Martínez coronó en la red una gran combinación con Carrasco.

¿Será verdad que un equipo juega como vive? Ayer fue así. Algunos culparán al árbitro, pero lo cierto es que All Boys mostró por qué está peleando arriba y Córdoba por qué anda a los tumbos.

Conocchiari le gana en la carrera a Soto.