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 sábado, 26 de marzo de 2005  
Liga argentina
Vóley: Oportunidad desaprovechada
Scholem Sonder no pudo repetir y cayó ante Bolívar por 3 a 1. Ahora están 1 a 1

Pablo F. Mihal / Ovación

Cuando llegan los tiempos de definición el verbo ganar cobra un valor agregado. Ayer en el segundo partido de las semifinales (se juega al mejor de cinco), Scholem Sonder desaprovechó una valiosa oportunidad de sumar y cayó ante Orígenes Bolívar, el último bicampeón de la Liga Argentina de Vóleibol, por 3 a 1 (parciales 22-25, 25-17, 26-28 y 20-25).

El partido, con dos de los mejores equipos de la Liga, se sabía que sería duro de antemano. Finalmente se lo llevó el conjunto visitante (que en los próximos dos compromisos actuará de local) porque se equivocó menos y aprovechó mejor las situaciones con las que contó. Con chispazos, le mostró la chapa. La labor del opuesto Dalibor Polak -la figura-, hizo que la ausencia del atacante Leonardo Patti, lesionado en el primer partido, pasara inadvertida.

Para esta oportunidad el DT de Sonder, Juan Manuel Barrial, eligió para arrancar a Hernán Ferraro, Hernán Pesci, Fabio Phina, Christian Del Treppo, Mariano Giustiniano, Hernán De Luca y Marcelo Silva. Después ingresaron Agustín Rodríguez, Alejandro Robles, Ross Ballard y Matías Guidolín.

Desde el comienzo mismo del partido, Sonder no mostró la misma solidez que en su primera presentación y estuvo muy lejos del equipo que terminó primero y con cierta comodidad en la etapa regular. En el primer set tuvo problemas en la recepción y no pudo armar jugadas de ataque. Si a eso se le suma que no estuvo firme en el bloqueo -una muestra clara de que no supieron leer el ataque de la visita- el resultado comienza a cobrar cierto realismo.

Las cosas parecieron mejorar en el segundo set, donde se vio lo mejor de Sonder. Con contundencia a la hora de definir y mejorando el bloqueo, no tuvo problemas para llevarse el parcial 25-17 ante un rival que cayó en un pozo. Más allá de ganar el parcial, la irregular actuación de algunos de sus hombres comenzaba a jugar su partido.

En el tercer set se produjo el quiebre. Bolívar salió de su letargo, mientras que Sonder volvía a caer preso de sus errores. Las acciones se emparejaron y la pelea fue punto a punto. Y sabido es que, cuando hay equipos parejos, gana el que menos se equivoca. Y ese fue Bolívar, que más allá de que su técnico Daniel Castellani recibió una tarjeta amarilla, se impuso 28-26.

La paridad del tercer set se trasladó a los primeros puntos del cuarto, pero Sonder no pudo resistir el impacto. Volvió a mostrar imprecisión y terminó pagando los errores, permitiendo que con el 25-20 con que terminó el parcial, Bolívar empate la serie.

En la otra llave, Vélez se impuso por 3-1 a Swiss Medical y ahora se colocó 2-0 en la otra semifinal.
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El equipo rosarino no tuvo contundencia.

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