| domingo, 20 de marzo de 2005 | Mala conducta y mentiras Mentirles a compañeros y profesores y escribir las paredes con tiza son algunos de los argumentos que utilizaron dos escuelas privadas porteñas para no renovarle la matrícula a sus alumnos.
Una de las familias afectadas inició acciones legales en enero pasado contra el Instituto Leopoldo Marechal del barrio porteño de Mataderos. Juan Manuel Dragani, abogado de esta familia, dijo que la última audiencia de conciliación pedida por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires fue en agosto de 2004, pero que las partes no llegaron a ningún acuerdo.
Por este motivo inició una demanda judicial por daños y perjuicios contra la institución. "La causa data de marzo de 2004, cuando las autoridades de la escuela se negaron a renovarle la matricula escolar a una de las hijas del matrimonio que en ese momento tenía 15 años", dijo Dragani.
Las autoridades explican que la joven les mintió a sus compañeras y a la directora pedagógica del colegio acerca de un supuesto embarazo y posterior aborto, que al parecer no fueron reales. Dragani destacó que la joven no se retractó "porque nunca dijo las cosas de las que se le acusó".
En diciembre de 2003 una familia no pudo inscribir a sus hijo en el Instituto Medalla Milagrosa de parque Chacabuco. "Me niegan la inscripción porque dicen que el nene no se portaba correctamente en el colegio", explicó el padre del menor. (Télam) enviar nota por e-mail | | |