El gobierno le retiró los atributos a monseñor Baseotto

Buenos Aires.- El gobierno nacional dispuso hoy dejar sin efecto el acuerdo con monseñor Antonio Juan Baseotto como obispo castrense y remarcó que sus expresiones, referidas al ministro de Salud, Ginés González García, "recomendaban hacer algo parecido a lo que ocurrió en los años negros del país".

Así lo informó el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, en Casa de Gobierno, quien consignó que el presidente Néstor Kirchner rubricó el decreto 220, por el cual se deja sin efecto el acuerdo con el mencionado obispo, al tiempo que se derogó el 2499 del 1 de diciembre de 2002 que lo había designado.

El anuncio lo formuló acompañado del canciller, Rafael Bielsa, y el secretario de Culto, Guillermo Olivieri, luego de una reunión que mantuvieron con el jefe de Estado en su despacho de la Casa de Gobierno.

Fernández sostuvo que monseñor Baseotto formuló declaraciones que a juicio del Poder Ejecutivo Nacional "se convirtieron en alegorías de connotaciones muy fuertes en la Argentina, porque básicamente sus expresiones recomendaban hacer algo parecido a lo que ocurrió en los años negros del país cuando se llevaban a cabo los vuelos de la muerte".

La controversia surgió cuando el prelado utilizó la cita bíblica en la que se habla de que quienes "escandalizan a los pequeños se les debe colgar una piedra de molino al cuello y arrojarlos al mar" en referencia al ministro de Salud, Gines González García, que había propuesto analizar la despenalización del aborto.

A modo de replica el presidente Néstor Kirchner solicitó a la Santa Sede, el relevo de monseñor Baseotto por sus expresiones contra el ministro de Salud; pero el Vaticano mantuvo en su puesto al obispo castrense.

"Con esta decisión el Gobierno nacional pretende mantener incólume su compromiso absoluto, no solamente con la plena vigencia y defensa de los derechos humanos, y en el combate a la impunidad, a la injusticia, y a cualquier forma de ocultamiento de crímenes aberrantes, así como a cualquier forma de reivindicación de esos sucesos, tácita o explícita", dijo el jefe de ministros.

Asimismo, la medida suspende la vigencia del decreto 1084 de fecha 14 de setiembre de 1998, en lo que hace a la remuneración de cinco mil pesos mensuales para quien ejerecía el cargo, hasta tanto se produzca la designación de un nuevo obispo castrense.

Para el canciller Bielsa, la Iglesia Católica dará los mismos pasos que se siguieron con antelación a conferirle el acuerdo para la designación de monseñor Baseotto. (Télam)