Un comerciante fue quien hirió al protagonista de un raíd delictivo

Ocurrió el lunes tras el robo a una mueblería. Aseguró que el ladrón, al que seguía, le había disparado primero

El hombre que el lunes a la tarde baleó al ladrón que había protagonizado un alocado raíd tras asaltar una mueblería del macrocentro es el propietario del negocio. El comerciante, "un excelente tirador", según una fuente policial, se presentó pocas horas después del violento suceso en la comisaría 5ª y, después de prestar declaración, fue liberado por disposición de un juez de Instrucción.

Cerca de las 22.30 del lunes, Orlando P., de 38 años, llegó a la seccional de Italia al 2100 junto a su abogado y brindó su versión del caso. Les dijo a los policías que, tras el atraco, corrió al maleante y que abrió fuego después de que el ladrón le disparara dos o tres balazos.

Según había indicado una fuente policial, poco después de las 16.30 del lunes, el maleante, Roque De León, entró a la mueblería El Algarrobo, situada en Corrientes 1845. Allí, en el salón de ventas, estaba Orlando junto a su suegro, Héctor C. El maleante encañonó a los hombres y les exigió la entrega de dinero.

Mientras el dueño del comercio le entregaba 350 pesos, su suegro se resistió y trató de inmovilizar al asaltante, quien le asestó un culatazo en la cabeza. Entonces, el ladrón decidió escapar corriendo por calle Corrientes hacia el sur. Detrás de él salieron tras sus pasos los empleados de la mueblería y otros vecinos.

Cuando De León llegó al cruce de Pasco y Entre Ríos, fue alcanzado por tres disparos y el grupo de hombres que lo corría desde la mueblería abandonó la persecución. A pesar de estar herido, el ladrón pudo llegar hasta un quiosco ubicado en Entre Ríos e Ituzaingó. Allí, unos segundos antes, había entrado Lisandro Araujo, de 21 años, que asustado por los disparos que se escuchaban en la zona, dejó su auto estacionado sobre la primera de las calles y en contramano.

El muchacho ingresó al quiosco con la intención de avisar a la policía, pero De León lo retuvo, lo obligó a subir a su Renault Clio y a conducir. Terminó chocando contra un Renault 18 estacionado en la plaza Libertad.

El lunes a la noche, Orlando declaró en la comisaría 5ª que después que el ladrón entrara al comercio "lo llevó al taller de reparación de los muebles". Entonces, según su relato, el suegro quedó frente a De León y decidió resistir el robo. Primero recibió un culatazo en la cabeza y después mientras forcejeaba con el ladrón se disparó el arma del maleante y el proyectil impactó en el techo.

El ladrón se marchó y el comerciante lo siguió armado con una pistola calibre 7,65. Cuando Orlando y el ladrón llegaron a Pasco y Entre Ríos, León abrió fuego y el mueblero respondió con su pistola. Fue imputado por el delito de lesiones por la jueza de Instrucción Mónica Lamperti.

De León, tras ser detenido por la policía.