Lula arma un gabinete más abierto a sus aliados

Ganaría espacio el centrista PMDB, mientras José Dirceu vuelve a ser el principal operador del presidente

Brasilia. - El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunciará esta semana la reorganización de su gabinete, una medida compleja que debe equilibrar el mayor espacio político que dará a sus aliados en el gobierno para facilitar su reelección. Analistas y políticos en Brasilia estiman que Lula no definirá hasta el fin de semana la más importante reforma ministerial de su mandato, iniciado el 1º de enero del 2003, que debe crear las condiciones para facilitar su reelección en los comicios presidenciales del año próximo.

El analista Luciano Dias, del Instituto Brasileño de Estudios Políticos (IDEP), consideró que "una reforma ministerial exitosa aumenta el grado de confianza de los aliados en el gobierno y en que éste compartirá con ellos el poder futuro". La reforma, que daría más espacio en el gobierno al centrista y dividido Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), también buscará "esterilizar el surgimiento de nuevas candidaturas" desde partidos aliados insatisfechos con su escasa participación en el gobierno, agregó Dias.

De los 35 ministerios existentes en Brasil, el PT de Lula controla 19. El PMDB, un de partido de extendida presencia legislativa, tiene apenas dos, mientras que el derechista Partido Progresista (PP), al que pertenece el presidente de la Cámara de Diputados, no controla ningún ministerio y la reforma le permitiría quedarse con por lo menos uno.

"A partir de la reforma, el PT tendrá que conformarse con ser un miembro más del gobierno de coalición", explicó el politólogo Dias. Analistas ven muy probable que Aldo Rebelo, ministro de la Coordinación Política, que pertenece al Partido Comunista de Brasil (PCdB), pierda su puesto, que podría quedar en manos del PT. Con esa salida, el jefe de Gabinete, José Dirceu, recuperaría, total o parcialmente, las funciones de principal operador político de Lula.

Dirceu, un político acostumbrado al juego duro, fue el organizador de la coalición que llevó al poder a Lula. Lula ganó las elecciones del 2002 aliado a un pequeño partido de centroderecha. Reforzar la posición de Dirceu le daría "más músculo" al gobierno, especialmente en su trato con un Congreso que no es dócil. El jefe de gabinete, además, es visto como un operador más eficiente que Rebelo y, por pertenecer al PT, tiene más autoridad para encuadrar a un partido acostumbrado al debate interminable.

"La conformación del nuevo gabinete definirá el rumbo del gobierno" en los dos últimos años del mandato de Lula, dijo por su lado Merval Pereira, columnista del diario O Globo. "Un gobierno centralizado en el PT va a dificultar las alianzas para la reelección. Pero un gobierno de coalición permitirá una transición suave y ahí el presidente Lula tendría prácticamente garantizado" un nuevo período, aseguró.

Para Luciano Días "a medida que transcurre el mandato, el gobierno tiene la necesidad de buscar más apoyo en el Congreso y de transformarse en un real gobierno de coalición", dijo.

Entre los cambios más importantes que los analistas esperan se encuentra el pase del economista y ex candidato presidencial Ciro Gomes (del Partido Popular Socialista, PPS) del ministerio de Integración Nacional al Ministerio de Salud, actualmente en manos del PT.Otra nombramiento sería el de la senadora Roseana Sarney en algún ministerio. Roseana está actualmente sin partido, pero de ser nombrada podría afiliarse al PMDB. (Reuters)