El presidente, otra vez señalado por poner en peligro la libertad de expresión

Dura embestida de la SIP contra Kirchner

El organismo de prensa comparó la actitud del mandatario argentino con las de Castro y Chávez

El presidente Néstor Kirchner fue colocado junto a sus pares de Cuba, Fidel Castro, y de Venezuela, Hugo Chávez, al tope de la lista de los mandatarios que representan un peligro para la libertad de expresión en el continente, al comenzar ayer la reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en Panamá.

El titular de la comisión de libertad de prensa de la SIP, Gonzalo Marroquín, denunció "la forma discriminatoria en que el gobierno limita el acceso a la información y utiliza las pautas publicitarias para premiar o castigar a medios según su línea editorial".

Esta fue la evaluación que hizo una delegación de la SIP que visitó la Argentina a principios de marzo. En esa ocasión, "nos encontramos con una actitud intolerante de parte de Kirchner", recordó.

El guatemalteco hizo hincapié en que "durante tres días consecutivos (Kirchner) atacó a la SIP y a algunos de los miembros de la delegación en sendos discursos en actos públicos".

El presidente de la SIP, Alejo Miró Quesada, quien integró la delegación que visitó el país, dijo que notó una "soberbia muy grande" de las autoridades en relación con la prensa.

Marroquín agregó que, "mientras persistan actitudes como las de Castro, Chávez o Kirchner, siempre habrá (en la SIP) una voz que se levante para defender el derecho a informar y ser informado".

Es previsible que el informe final sobre la Argentina (que se difundirá mañana) no incluya semejante comparación, ya que algunos delegados del país la consideraron fuera de lugar. "Se caricaturiza la situación", explicó Raúl Kraiselburd.

Según el documento preliminar de la SIP, en la Argentina hay libertad de prensa, pero corre peligro por la actitud hostil, casi autoritaria, de su gobierno". También resalta que "se advierte una actitud de recelo y desconfianza hacia los periodistas".

El informe subraya que Kirchner "recurre con obstinada frecuencia a la descalificación de legítimas opiniones o informaciones". Días atrás, el jefe del Estado había rechazado tajantemente las críticas.

El documento, no obstante, sostiene que "el acceso a fuentes oficiales desapareció desde el momento en que, según declaraciones de Alberto Fernández, jefe de Gabinete, la estrategia de comunicaciones la realiza directamente el presidente con discursos en actos públicos, poniendo en evidencia una falta de respeto a la función de la prensa como medio idóneo para informar".