No habrá más gritos ni olvido para Bati

El Al Arabi de Qatar habría despedido a Gabriel Omar Batistuta por sus continuas lesiones. El goleador se acercaría a su retiro

Los jeques dueños del club Al-Arabi de Qatar despidieron al delantero de Reconquista Gabriel Batistuta -el máximo goleador de la historia del seleccionado nacional-, a raíz de sus contínuas lesiones y de los escasos partidos que jugó en el último torneo, informó ayer el periódico francés L'Equipe.

El diario galo indicó que la rescisión del contrato de Batistuta se debió a que, en el actual campeonato, estuvo presente solo en tres partidos, sin haber marcado ningún gol, lo que supondría su retiro de la actividad futbolística. El ex Newell's había firmado un contrato por dos años con una remuneración global de 7.600.000 euros y lo rescindió tres meses antes de su finalización.

El delantero respondió a las expectativas que su arribo a Al-Arabi había creado, anotando 26 goles en su temporada inicial. Así se adjudicó la tabla de goleadores del campeonato anterior en Qatar, pero ese rendimiento no se repitió, debido a las contínuas ausencias por diversas lesiones.

Por lo tanto, esto significaría el final de su campaña a los 36 años, aunque sigue latente la posibilidad de retornar a Fiorentina de Italia. También la Roma le realizó ofrecimientos para asumir un cargo directivo en la entidad.

Según declaró anteriormente, Batistuta reconoció que dejó muchos amigos en Roma y si le ofreciesen un proyecto serio, podría trabajar con ellos. "No cierro la puerta a nadie y no tengo ningún problema en regresar como directivo", aseguró en Bati.

Batistuta, de 36 años, rechazó hace unos meses un ofrecimiento para jugar en San Lorenzo, luego de consultar con su esposa, Irina, y, fundamentalmente, "por cuestiones de seguridad". Durante una de sus últimas estadías en la Argentina, también reconoció que iba a iniciar el curso de entrenador por Internet.


Historia de goleador
Batistuta, nacido el 1º de febrero de 1969 en Reconquista e iniciado en Newell's, siguió la rutina de los futbolistas nacidos en esta ciudad y pasó a uno de los grandes. En el River de Passarella jugó muy poco y a mitad de esa temporada fichó por Boca.

Pese a eso, enseguida se ganó el afecto de los xeneizes y jugó con los colores de Boca hasta 1991, año en que debutó en la selección argentina con la que obtuvo la Copa América en Chile, bajo la conducción de Alfio Basile como director técnico.

Esa brillante aparición le valió el Balón de Oro como mejor jugador de América y así emigró hacia el continente europeo, al ser contratado por Fiorentina, de Italia. En 1993 obtuvo nuevamente la Copa América con Argentina (en Ecuador) y en 1994 participó en la Copa del Mundo de Estados Unidos.

En 1998, en un encuentro frente a Paraguay (por eliminatorias sudamericanas), superó la marca de Diego Armando Maradona como máximo goleador de todos los tiempos de la selección nacional. Asimismo en Italia, en la temporada 1994-1995, superó además otro récord ya que logró marcar al menos un gol en los doce primeros partidos del campeonato.

En la ciudad de Florencia, se convirtió en ídolo para todos los simpatizantes de Fiorentina, sobre todo al no haberse marchado del club una vez descendido a la segunda división del campeonato italiano. Al año siguiente el equipo recuperó la categoría, de la mano de sus innumerables goles.


Hambre de triunfo
Pero a los 31 años de edad, Batistuta poseía aún hambre de triunfo en las ligas europeas y al no poseer Fiorentina un equipo con grandes expectativas, comenzó a mirar nuevos horizontes.

La mayoría de los grande clubes de Europa lo pretendieron. Y a principios de la temporada 2000, en un pase récord fue fichado por Roma, también de Italia. El interés romano se vio justificado ya que con sus goles logró sacar al equipo capitalino campeón de Italia. En la siguiente temporada fue acosado por reiteradas lesiones que también lo perjudicaron en el que fue su último Mundial.

Luego de la Copa del Mundo de Corea-Japón 2002, Batistuta anunció su posible retiro del seleccionado nacional. Y desde allí, no fue convocado en el segundo ciclo de Marcelo Bielsa al frente de la selección argentina, y su sucesor José Pekerman optó por la misma actitud.

En 2003 se realizó su traspaso a Inter de Milán, donde tuvo un breve paso y compartió la delantera del equipo, entre otros, con el ex River Hernán Crespo, el italiano Vieri y el uruguayo Alvaro Recoba. Y desde hace dos años jugaba en el Al Arabi Sport, de Qatar.

Idolo en la mayoría de los clubes para los que jugó, en Fiorentina y de todos los argentinos, Batistuta hizo todos los méritos necesarios para no dejar dudas y poder ser calificado como uno de los mejores delanteros de la historia del fútbol mundial.

Batistuta es el máximo anotador en la historia de la selección.