| domingo, 13 de marzo de 2005 | El Parlamento británico aprobó una nueva ley antiterrorista Londres. - Tras un debate de 30 horas, el Parlamento británico aprobó el viernes una controvertida ley antiterrorista, que anteriormente había sido rechazada en varias oportunidades por la Cámara de los Lores (Senado). Sin embargo, finalmente, el primer ministro británico, Tony Blair, y el líder opositor, el conservador Michael Howard, llegaron a un compromiso según el cual la ley será revisada en un año por el Parlamento.
La nueva legislación autoriza al ministro del Interior, entre otros, a poner bajo arresto domiciliario sin acusación o proceso y por tiempo indeterminado a sospechosos de terrorismo. Sin embargo, un tribunal especial deberá aprobar esta decisión.
Estas nuevas reglamentaciones reemplazan a las leyes antiterroristas que estaban en vigencia actualmente y que fueron aprobadas poco después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EEUU. Estas le otorgaban al ministro del Interior el poder de mantener en prisiones de alta seguridad a sospechosos de terrorismo extranjeros sin acusación ni juicio y por tiempo indeterminado.
Este poder fue calificado por los «Law Lords», el máximo tribunal de Gran Bretaña, como una grave violación de los derechos humanos y en contra de los principios básicos del Estado de derecho. Basándose en esta decisión de los «Law Lords» de diciembre pasado, nueve extranjeros sospechosos de terrorismo, que desde hace más de tres años se encontraban sin juicio en cárceles británicas, fueron puestos en libertad bajo condiciones muy estrictas.
Un tribunal en Londres ordenó el jueves en principio la liberación de un argelino, mientras que el viernes fueron puestos en libertad otros ocho hombres.
Los liberados, en su mayoría argelinos y tunecinos, recibirán dispositivos electrónicos de control y no podrán abandonar sus casas de noche. Además tienen prohibido utilizar teléfonos móviles o computadoras con acceso a Internet. Entre las condiciones figura también que los hombres dispongan de una sola cuenta bancaria y que sólo puedan hacer transferencias con autorización del Ministerio del Interior.
Entre los sospechosos figura el clérigo islámico Abu Qatada, de 44 años, al que se atribuye una estrecha conexión con la red terrorista Al Qaeda y de estar detrás de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid. Otro de los nueve hombres afectados por esta medida admitió que recaudó fondos para una escuela de Afganistán a la que asistían los hijos de "algunos de los hombres más buscados del mundo", según informó la agencia de noticias británica Press Association. Mahmoud Abu Rideh, palestino de 33 años, dijo también a un panel especial de apelaciones que se vio inocentemente implicado con un presunto terrorista de alto perfil cuyo nombre no se puede revelar por razones legales, según la misma fuente.(DPA) enviar nota por e-mail | | |