Tenerlo al Pato es un lujo

Noriega tiene un curriculum más que interesante como jugador y en el poco tiempo que lleva en Rosario mostró algunas puntas interesantes como entrenador. Si hay algo que nadie puede discutir es que el hombre tiene mucha experiencia. Tenerlo es un lujo, además de un honor.

Pero no hay que olvidarse dos cosas: Primero que Noriega llega a la ciudad para reforzar lo que Rosario ya tiene y, segundo, que el ex Puma no es mago.

Obviamente que el escaso tiempo con el que cuenta (él y todo el cuerpo técnico) para trabajar es el impedimento mayor. Porque con pocas prácticas en su haber -el plantel se juntó en febrero- es casi imposible que el equipo pueda tener una identidad definida en este 61º Campeonato Argentino que está por comenzar.

El hecho de contar con los jugadores muy poco antes del inicio del torneo o de la aparición de algún partido internacional se repite todos los años, pero parece que de esa experiencia no se aprende.

Es hora de cambiar, de apostar al futuro, de jugarse. Lo bueno sería darle cierta continuidad y así poder evaluar sobre bases sólidas y serias. Más allá de los resultados, por más que sean ellos los que mandan, sería un acto de inteligencia trabajar en primera instancia para terminar de la mejor forma posible el Campeonato Argentino y empezar un nuevo proyecto con este grupo de entrenadores a partir de los primeros días de abril, de cara a lo que se viene.

Que la cosa no se termine con la finalización del torneo de selecciones sino que se siga trabajando y se use el año calendario para entrenamientos y más partidos. Sólo así, con más tiempo, el seleccionado puede llegar a tener una identidad real.

No existen secretos. El trabajo y la experiencia es la única forma. Por eso, aprovechar el empuje de estos entrenadores y el arsenal que puede aportar Noriega sería apostar a pleno. Las condiciones están dadas, sólo falta la decisión política de llevar la idea adelante y conseguir los recursos para hacerla efectiva.

P.F.M.