| miércoles, 02 de marzo de 2005 | Las esperanzas de cambio de la base del Frente Grande Montevideo. - En medio de una de las manifestaciones de júbilo más grandes de la historia uruguaya, una mujer llora desconsoladamente sentada al cordón de la vereda, sobre una de las avenidas de Montevideo por donde pasa la caravana que lleva al nuevo presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez.
"Menos mal que no vine en bicicleta, porque ya no puedo más y creo que me va a dar algo", dice la mujer, mientras algunas personas se acercan en actitud consoladora. El llanto de Nora es también una manera de expresar la alegría y la profunda emoción que embarga a miles de uruguayos, que en octubre pasado votaron para posibilitar el acceso al gobierno, por primera vez, de un partido de izquierda. "Ustedes no saben lo que significaba hace 25 años llevar esta bandera, sencillamente te mataban", les explica Nora a los jóvenes, que la miran entre admirados y confundidos entre miles de banderas rojas, blancas y azules, colores que identifican a la coalición Encuentro Progresista-Frente Amplio-Nueva Mayoría.
Nora fue militante clandestina durante la dictadura militar (1973-1985), estuvo exiliada en Cuba y en Europa, pero desde el retorno a la democracia vive en Montevideo. "Para ellos, esto es ahora lo más natural, porque se criaron en democracia, pero yo no puedo olvidarme de todo lo que pasaron miles de uruguayos por el solo hecho de pensar distinto", agrega. Nora trabaja por su cuenta, elabora dulces y mermeladas y aunque asegura que no espera del nuevo gobierno ningún beneficio personal confía en que habrá cambios.
Los medios de difusión locales se han colmado de mensajes de uruguayos que andan por todo el mundo y la gran mayoría coincide en que el gobierno de izquierda que asumió ayer modificará el rumbo del país. Unos piden que disminuya la corrupción, otros que se generen puestos de trabajo, o que mejore el sistema de salud.Muchos uruguayos que llegaron desde Suecia, Francia, España, Canadá, Estados Unidos o Argentina expresaron sus intenciones de volver a su país, aunque también hay quienes son más cautos y prefieren esperar para ver cómo se desarrollan las cosas. enviar nota por e-mail | | |